Después de que ayer el president del Govern, Carles Puigdemont, viajara a Madrid acompañado del vicepresident Oriol Junqueras y el conseller de Exteriores, Raül Romeva, y dijera públicamente que haría una propuesta a Mariano Rajoy; hoy el Govern ha anunciado que ya ha acordado solicitar formalmente al ejecutivo español la abertura de negociaciones sobre los términos y las condiciones para la celebración del referéndum para que los catalanes decidan su futuro.
Así lo ha puesto de manifiesto la portavoz del Govern y consellera de la Presidencia, Neus Munté, después de la habitual reunión del consejo ejecutivo. Para elaborar la propuesta, Munté ha subrayado que "nos basamos en las resoluciones parlamentarias en qué la mayoría han posicionado a favor de un referéndum". Pero no sólo en eso.
El acto central del Pacto Nacional para el Referéndum, y las 500.000 firmas alcanzadas en favor que los catalanes puedan votar, también ha impulsado en el Gobierno a salir adelante con la propuesta. "Es por eso que hoy elevamos esta solicitud formal que será dirigida al presidente del gobierno español en los próximos días", ha matizado Munté, al mismo tiempo que ha emplazado los de Rajoy a dar una respuesta "concreta" a su propuesta.
Oferta de diálogo
El Govern ya había hablado varias veces de hacer esta propuesta al Estado, pero todavía no se había concretado de manera formal. Ahora ya lo han hecho.
Precisamente por eso, Munté ha explicado que "estamos en posición de oferta de diálogo ante el gobierno del Estado", pero ha querido dejar claro que "eso no es nuevo". El objetivo es pedir ahora el inicio de las negociaciones.
▶️ @neusmunte: “El Govern de la Generalitat vol dialogar per parlar sobre termes i condicions per la celebració referèndum” pic.twitter.com/Yt6x6X0udc
— Govern. Generalitat (@govern) 23 de maig de 2017
Ahora bien. Las reacciones de los diferentes miembros del gobierno español, como la de la ministra de Defensa que ha acusado Puigdemont "de intento de golpe de estado", no han gustado nada al Gobierno, que ha asegurado que "se califican por sí solas" y que se trata de "expresiones desafortunadas".
Por todo ello, Munté se ha reiterado en su disposición a hablar y "no levantarnos hasta el último minuto de la prórroga" y ha pedido "una respuesta que esté a la altura del civismo con que nosotros formulamos esta propuesta".