El diario berlinés Neues Deutschland ha informado esta semana de la controversia generada por las declaraciones del excomisario José Manuel Villarejo en las que vinculó los atentados de Barcelona y Cambrils del 17-A con el CNI. Concretamente, el rotativo traslada que "hace tiempo que hay indicios" de la conexión entre la inteligencia española y los ataques terroristas. Por otra parte, el artículo alerta del bloqueo del PSOE a abrir una investigación parlamentaria para aclarar los hechos y la importancia que eso tiene en el ámbito internacional, ya que muchas de las víctimas eran residentes de la UE.
Indicios
Hace tiempo que hay indicios que el CNI estuvo implicado en los hechos. Incluso se reconoció oficialmente que hubo contactos entre el CNI y Es Satty mientras estaba en la prisión por narcotráfico". Así, el rotativo citado también sospecha, cómo ya lo han hecho varios medios internacionales, de la figura del imán de Ripoll y su colaboración con los servicios de inteligencia española. Aparte de eso, también se hacen eco de otras incógnitas que han vuelto a surgir a raíz de las declaraciones de Villarejo, como la falta de pruebas para demostrar que Es Satty es muerto. "Oficialmente, se dice que Es Satty murió en el taller de bombas", explica el diario, "pero Javier Martínez [padre del niño de tres años muerto en los atentados] y muchos catalanes ya no se lo creen". El rotativo sigue estirando el hilo de las sospechas, y relata cómo "se desestimaron todas las peticiones de su abogado defensor para investigar los hechos".
Europa
Otro punto de preocupación para este diario alemán es la negativa del Gobierno ante la petición de siete partidos en el Congreso de volver a investigar los hechos. Tal como lo detallan, el PSOE "ha impedido reiteradamente la puesta en marcha de comisiones parlamentarias con los votos de los partidos de derechas". Además, el diario recuerda que esta controversia también es de interés europeo, "al fin y al cabo, los 16 muertos provenían de cinco estados miembros de la UE", y ha informado de las peticiones de los diputados vascos y catalanes, entre ellos el presidente Carles Puigdemont, en el Parlamento Europeo para desbloquear las investigaciones.
Después de un largo silencio, la entonces delegada del gobierno central en Catalunya, Teresa Cunillera, se limitó a decir que las declaraciones del excomisario no tienen "credibilidad", y no dejó claro si las investigarán. "Las insinuaciones no tienen una base lógica, no tienen una base material y no tiene más explicación que las ganas de hacerla grande," afirmó en una rueda de prensa. Por su parte, el independentismo se ha activado en varios frentes después de las declaraciones del excomisario. Desde Barcelona, el Govern de la Generalitat estudia acciones legales que se puedan emprender. Desde Madrid, los grupos independentistas catalanes, pero también vascos y gallegos, se han aliado para volver a registrar una nueva petición de comisión de investigación sobre los atentados en el Congreso de los Diputados.