El economista Santiago Niño Becerra ha teorizado en torno a las medidas que usa el gobierno francés para frenar los precios al alza. En especial; el de la luz. Tal como ha recogido ElNacional.cat, el ministro de Economía francés, Bruno Le Maire, ha utilizado España como mal ejemplo de gestión política para amortiguar la factura de la electricidad. "La factura de la luz en España ha crecido un 60%, mientras que en Francia un 4%", ha asegurado Le Maire. A propósito de estas declaraciones, Niño Becerra se ha hecho una pregunta muy pertinente: "Por qué el gobierno de España no copia a lo que hace el francés"?. Hay que insistir en el hecho de que las diferencias entre las medidas que ha tomado el ejecutivo de Macron y el de Sánchez son muy grandes. La inflación francesa es más baja que en las otras economías europeas. De hecho, la mitad que la española.
"Observen el que pasa en España, en el Reino Unido, con un aumento de las facturas de la electricidad del 60%, del 70%, del 80%, y nosotros, el 4%. No digo que esta subida sea escasa, pero insisto en que vean como el presidente a Emmanuel Macron y su gobierno ha amortiguado el choque", ha declarado Le Maire a los periodistas. El impacto en las facturas de los ciudadanos y las pequeñas empresas es muy inferior a Francia por el tope impuesto por el ejecutivo de Macron hace más de un año. En cambio, el Gobierno ha optado por no poner freno en las facturas, sino hacerlo de manera indirecta, bajando impuestos o incluso con el llamado tope ibérico en el precio del gas en el mercado mayorista. Sin embargo, el ministro francés ha reconocido que el actual tope no se mantendrá indefinidamente, y a partir del 2023 se revocará, pero se ha comprometido en que las facturas no se hinchen bruscamente cuando se retire. "No lo hemos escondido, en enero del 2023 habrá aumentos del precio del gas y de la electricidad, pero serán atenuados, como lo que hemos hecho desde hace 14 meses", ha asegurado al respecto. Hay que recordar que limitar el precio de la luz actualmente le cuesta en Francia aproximadamente 20.000 millones de euros de las arcas públicas.
El último paquete de medidas que presentó el gobierno francés para parar la inflación fue en el mes de julio. "Debemos y podemos proteger a nuestros compatriotas contra la inflación, pero cuidando las cuentas públicas", subrayó el ministro de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire al anunciar ante la prensa un proyecto de ley sobre el poder adquisitivo al final de un Consejo de Ministros excepcional. El ministro remachó que "no todo es posible" en términos de gasto porque "hemos llegado a la cota de alerta de las finanzas públicas" y subrayó que este nuevo dispositivo no desviará al Ejecutivo de su objetivo de reducir el déficit público al 5% del Producto Interior Bruto (PIB) en 2022 para seguir bajándolo hasta el 3% en 2027. Le Maire también puso el acento que este nuevo paquete no se financiará ni con más deuda, ni con un aumento de los impuestos, sino que por el contrario se suprimirá el canon que pagan para financiar la radio y la televisión públicas 23 millones de familias (138 euros) y las empresas del sector hostalero.