Las amenazas de muerte siguen llegando al Gobierno. Este lunes, una nueva. Según han informado desde el PSOE y confirman fuentes del Ministerio del Interior, la ministra de Industria, Reyes Maroto, ha recibido en las últimas horas una carta con una navaja "aparentemente" ensangrentada en el interior. Este nuevo sobre amenazador llega después de los que recibieron, la semana pasada, el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska; el candidato de Unidas Podemos y exvicepresidente, Pablo Iglesias, y la directora general de la Guardia Civil, María Gámez. La actitud de Vox ante estas amenazas ha provocado justamente un vuelco en la campaña electoral madrileña. Maroto será vicepresidenta de Ángel Gabilondo si puede formar gobierno después del 4-M.

La misma Reyes Maroto ha reaccionado a través de su cuenta de Twitter. "Las amenazas y la violencia nunca acallarán la voz de la democracia", ha advertido la ministra de Indrustria, que ha sostenido que "la libertad prevalecerá". Maroto ha agradecido todas las muestras de apoyo y ha asegurado que esto "refuerza su voluntad de trabajar por un futuro mejor". Este mediodía ha presentado una denuncia en la comisaría del CNP del Congreso.

Según informan fuentes de Interior, el Ministerio de Industria y Turismo ha recibido "una carta dirigida a la ministra con una navaja aparentemente ensangrentada". Las mismas fuentes señalan que se ha abierto una investigación al respecto. Fuentes del Departamente de Maroto confirman que la navaja, de tamaño mediano, contenía "marcas rojas que la policía está analizando si es sangre o pintura". En el sobre, de tamaño DIN-A4, también había "un montón de folios grapados con copias ampliadas de mensajes de WhatsApp y Twitter", así como "un folio manuscrito con palabras sueltas y frase" que todavía no pueden detallar.

 

¿Cómo se lo ha hecho para eludir el control de seguridad? Según las fuentes del Ministerio de Industria, el sobre incluía también un CD que impedía que la navaja apareciera en el escáner.

El presidente español Pedro Sánchez ha avisado de que "no lo permitirán" y que "no dejarán que el odio se apodere de la convivencia en España", trasladando su apoyo a Reyes Maroto. La candidata y presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso es quien más ha tardado en condenarlo, pero lo ha hecho, asegurando que "las amenazas a los representantes públicos no tienen sentido en un país en libertad".

El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha expresado "toda su solidaridad con Reyes Maroto", y ha asegurado que "ya está bien de amenazas fascistas". También ha reaccionado la líders de Ciudadanos, Inés Arrimadas, que ha trasladado su "condena más firme a la terrible amenaza de muerte", ha deseado que el responsable responda ante la justicia y ha advertido que "esto no puede seguir así".

Las amenazas no se detienen

Concretamente, la carta que recibió Pablo Iglesias el pasado jueves decía lo siguiente: "Pablo Iglesias Turrión, has dejado morir a nuestros padres y abuelos. Tu mujer, tus padres y tú estáis sentenciados a la pena capital. Tu tiempo se agota". Iba acompañada de cuatro balas de 7,62mm. La misiva de Marlaska llevaba referencias a la Policía Nacional y la Guardia Civil: "Tienes diez días para dimitir. El tiempo de reírte de nosotros se ha acabado. Policía Nacional, Guardia Civil. El tiempo lo tienes en contra para los taponazos (como se conocen los tiros en argot policial)". Las cartas están siendo analizadas en la Comisaría General de la Policía Científica, que ve las amenazas "creíbles".

Iglesias vuelve a la SER

Tres días después de que abandonara los estudios de la SER, ante las provocaciones de la extrema derecha de Vox, el candidato Pablo Iglesias ha vuelto al programa de Àngels Barceló este lunes. Lo ha hecho en el marco de las entrevistas de campaña, después de que los ultras hayan puesto en cuestión las balas que recibieron tanto él como el ministro Fernando Grande Marlaska y María Gámez, directora de la Guardia Civil. Iglesias ha enviado un doble aviso a navegantes. En primer lugar, que "el fascismo es una amenaza para la democracia". En segundo lugar, que "el fascismo forma parte del proyecto de Ayuso".