La creadora de contenido valenciana Gala Martí ha denunciado en las redes sociales que este sábado la han expulsado a ella y a sus amigas de un pub de la ciudad de Valencia por dirigirse al camarero en catalán. La discriminación ha tenido lugar precisamente el Día de los Derechos Lingüísticos. En este sentido, destaca el hecho de que este año se han denunciado 102 discriminaciones lingüísticas en el País Valencià.
Gala Martí ha explicado que el sábado, después de cenar, acudió al pub Garden Shisha y, a la hora de preguntar si tenían mesa para cuatro personas, el camarero cuestionó que lo hiciera en catalán: "¿Por qué me hablas en valenciano?". Martí le contestó que lo hacía «porque estamos en Valencia». A continuación el camarero finalizó la conversación con un «Pues no hay mesa».
La joven ha querido destacar que cuando se encuentra en un territorio de habla catalana en ningún momento se plantea en qué lengua tiene que expresarse: «Siempre lo hago en valenciano y aunque me he tragado muchas caras de perro haciendo ver que no me entendían, nunca me han echado de manera tan descarada de un sitio. Literalmente, no nos han dado mesa para hablar nuestra lengua, fuerte».
No puede pasar por alto la discriminación
Martí ha recalcado que «seguramente hace tiempo hubiera pasado del tema, no hubiera dicho nada por redes, pero hemos llegado a un punto que la denuncia lingüística es necesaria. ¿Hasta qué punto tenemos que seguir soportando esta discriminación lingüística? Repito: no nos han dado mesa por hablar en valenciano. Ahora ve tú y cuéntaselo a cualquier persona del mundo a ver si se lo cree». «El problema no es que no sepa hablar en castellano (muy orgullosa de saberlo sin haber hecho ningún esfuerzo), el problema es que se ha normalizado un autoodio hacia la lengua inadmisible», ha denunciado.
El bar no se disculpa
A raíz de esta discriminación lingüística, Gala Martí colgó un vídeo a su perfil de Instagram donde explicaba los hechos y etiquetaba el local donde le había pasado. El pub, Garden Sisha, no tardó en responderle y, en lugar de pedirle disculpas, le contestó: «Qué pena que tus padres no te hayan educado bien».
Retroceso de la lengua
La situación me ha recordado cuando estudiaba Historia de España y Franco castigaba por hablar en catalán. No podemos permitir estas situaciones, se tienen que denunciar, se tienen que hacer públicas, para que la gente vea cuál es la realidad lingüística de mierda que tenemos ahora mismo", ha concluido. "Muy decepcionada y con ganas de quemarlo todo, salir a la calle y gritar a los cuatro vientos que la lengua está muriendo y que si no actuamos ahora mismo, ya no podremos hacer nada."
Finalmente, a causa del apoyo que ha recibido su denuncia en las redes, la chica ha querido hacer otro vídeo en Instagram donde cuenta todo lo ocurrido.
Imagen principal: Un surtidor de cerveza en un bar / Unsplash