Siguen las polémicas en torno a Vox. El número 2 de los ultras en Catalunya, Joan Garriga, fue pillado el pasado 23 de diciembre en una cena que acabó con consignas franquistas. En concreto, según detalla Crónica Global, la cita se dio en la zona alta de Barcelona, en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi, donde uno de los comensales empezó a recitar un poema escrito por un antiguo alto cargo de la dictadura, José Luis Santiago de Merás, y para acabar gritó: "¡Arriba España!". Mientras tanto, Joan Garriga reía. Algunas fuentes presentes han detallado al digital que otros dos asistentes también hicieron proclamas a favor de Francisco Franco. Sin embargo, el punto álgido de la cena se dio cuando, en medio de la exaltación, uno de los participantes gritó con fuerza: "¡Viva Franco, viva el caudillo!". La respuesta del resto fue arrancar en aplausos y una fuerte ovación.

Vox se desvincula

Desde Vox se desvinculan de esta cena de Joan Garriga y aseguran que era una cena de conocidos aficionados del RCD Espanyol. Además, matizan que había asistentes que se levantaban de la mesa para cantar villancicos, pronunciar discurso antológicos o cantar canciones de Elvis Presley. Otras fuentes presentes en la cena también han señalado que la mesa de Garriga trató de "frenar" la exaltación franquista cuando uno de los comensales advirtió que gente del interior del restaurante había grabado la escena.

Aparte de gritar consignas franquistas, los presentes a la cena también pegaron adhesivos de la Unión de Brigadas en las botellas de vino que iban sacando a la mesa, una entidad supuestamente afín a Vox que se autodenomina "constitucionalista". Según apuntan ellos mismos, su principal ocupación se basa en ofrecer "cobertura jurídica" a aquellos que se dedican a retirar símbolos independentistas del espacio público, una actividad que catalogan de "limpieza", "democratización" o "neutralización".

Las polémicas de Joan Garriga

Esta no es la primera en la que se ve involucrado Joan Garriga. Administrador de patrimonios financieros e inmobiliarios de profesión y primo de Ignacio Garriga, secretario general de Vox y también diputado y líder de la fuerza en Catalunya, se ha visto envuelto en una serie de polémicas por su ideología de extrema derecha y por su vinculación con la formación. Como portavoz de Vox en el Parlament, el político ha encabezado una propuesta de resolución que tenía el objetivo de "rendir homenaje a las familias y a las víctimas asesinadas por Lluís Companys".

El pasado mes de septiembre cargó contra el gobierno de Salvador Illa por "abrazar el 11 de septiembre", una celebración que, según él, está "poco arraigada entre los catalanes". Además, el pasado octubre protagonizó una situación surrealista votando a favor, por error, de una resolución de Aliança Catalana que proponía declarar unilateralmente la independencia.