Òmnium Cultural ha puesto en marcha una acción de apoyo para captar donativos para La Bressola, las escuelas en catalán en la Catalunya Nord que están en peligro de desaparecer. Ante la situación económica delicada que viven los centros, la entidad independentista ha movilizado a sus socios, para defender un proyecto educativo y cultural clave para mantener vivo el catalán en la Catalunya Nord.

"Ahora más que nunca, no nos podemos permitir dejar caerse una entidad como la Bressola, que hace una tarea imprescindible para mantener vivo el catalán en la Catalunya Nord en un contexto de minorización lingüística", aseguran desde Òmnium, y por eso han activado sus mecanismos con que cuentan para echar una mano a la entidad,

Han abierto un portal web, para que quien lo crea conveniente, haga un donativo a la red de escuelas catalanas de la Catalunya Nord, que repercutirán fondos de captación que la misma entidad educativa abrirá en los próximos días. También han animado a sus socios a hacer explícito su apoyo afiliándose a la Asociación Amigos de la Bressola, que necesita toda la ayuda posible para poder seguir sacando adelante los centros donde aprenden en su lengua 1.100 alumnos.

En mayo no podrán pagar los salarios

La Bressola ha pedido este martes ayuda "urgente" en el Departamento de los Pirineos Orientales y en la Región de Occitania, para hacer frente a la falta de liquidez que auguran a partir del mes de mayo, y que supondrá, que no puedan pagar todos los salarios de sus 110 trabajadores. La entidad alerta que si no les dan apoyo en un margen de cincuenta días, se verán obligados a pedir a las familias que aumenten sus aportaciones, o en el peor de los casos, cerrar alguno de los centros de enseñanza inmersivo en catalán que tienen en Perpinyà, Nyils, Prada, el Soler, Sant Esteve, Pesillà y Canet de Rosselló.

El presidente de la Bressola, Guillem Nivet, atribuye la delicada situación a la inflación, pero también a las pocas aportaciones que desde hace años reciben de las administraciones públicas. Nivet ha explicado que tienen un presupuesto de 4,5 millones de euros, 1,9 de los cuales les financia la educación nacional francesa y el resto lo asume la misma entidad educativa.

La situación todavía ha empeorado más con la llegada al poder del alcalde de Perpinyà Louis Aliot, político del Reagrupamiento Nacional de Marine Le Pen, que los ha retirado una subvención de 60.000 euros por parte de este consistorio, más de incrementar las "cargas" en forma de impuestos. Si no reciben ninguna ayuda que pueda salvar su situación, los dirigentes del proyecto educativo en catalán convocarán una manifestación el sábado 15 de marzo a Perpinyà.