Una de las ventajas que tiene para los partidos esta campaña encorsetada por las restricciones anti-Covid es que les permite variar los planes más fácilmente. Como los aforos son limitados, no hace falta que se rompan los cuernos buscando espacios para meter multitudes o disimular vacíos. Contando con este margen de maniobra, Esquerra Republicana ha optado por hacer un cambio estratégico en la agenda y trasladar su mitin central del viernes en Barcelona al domingo en Girona.

Según argumentan fuentes del partido a ElNacional.cat, hay dos motivaciones que han conducido a esta modificación. La primera, la disponibilidad de Oriol Junqueras. Con el tercer grado, el presidente de los republicanos puede estar fuera de la prisión durante el día y los fines de semana, pero de lunes a jueves debe volver a dormir en la celda. Junqueras trata de compatibilizar su vida familiar con la presencia en campaña, para impulsar la candidatura de Aragonès. Y el comité de campaña hace lo imposible por compatibilizarlo.

Aparte de la vida privada de Junqueras, que aprovecha cada día para acompañar a los niños a la escuela, hay otro factor que los ha acabado convenciendo para mover el mitin central al domingo. Y es que de este modo podrán contar con la participación de Arnaldo Otegi. El líder de Bildu será la estrella invitada del acto que los republicanos celebrarán el domingo al Auditorio de la Mercè de Girona. Lo acompañará la portavoz del BNG, Ana Pontón.

También intervendrán la secretaria general del partido, Marta Rovira, el coordinador nacional de Esquerra Republicana y candidato a la presidencia de la Generalitat, Pere Aragonès, la exconsellera Dolors Bassa, la consellera Teresa Jordà y el presidente del Parlament, Roger Torrent.

Territorio Puigdemont y coincidencia con Sánchez

Hay todavía una tercera razón. ERC ha diseñado una campaña eminentemente concentrada en las grandes ciudades metropolitanas con el objetivo de seducir al electorado de izquierdas que hasta ahora no había comulgado con el independentismo. Básicamente en bastiones históricos del PSC. Durante los actos celebrados en estas ciudades, han intentado suavizar la imagen del independentismo para dejar claro que es un proyecto inclusivo.

Esta apuesta ha hecho que llueva las críticas de la parte más encendida del independentismo, que los acusa de haber renunciado a la República. Girona es una de las cunas del movimiento independentista y a menudo ha sido percibido como territorio Puigdemont, que fue el alcalde antes de presidir a la Generalitat. ERC aprovechará el acto para reivindicar su pedigrí independentista y, a la vez, poner en valor su política útil en Madrid. 

Casualidad o no, a la misma hora, Pedro Sánchez acompañarça a Salvador Illa en un míting del PSC también en Girona. 

Pareja de baile estable

Ya hace tiempo que Bildu se ha convertido en la pareja de danza de ERC en Madrid, en detrimento de JxCat. Ambas fuerzas, que suman 18 diputados al Congreso y 14 en el Senado, rubricaron el año 2019 un acuerdo estratégico de coordinación. La misión, tal como han explicado ellos mismos, es "frenar la agenda reaccionaria de la ultraderecha y conseguir recursos para el día a día". Dos objetivos que avanzan en paralelo al de la independencia de Catalunya y Euskadi, afirman. Los 5 diputados de Bildu y los 13 de ERC se han convertido en necesidad para el gobierno PSOE-Podemos.

El noviembre pasado, abertzales y republicanos confirmaban el sí en las cuentas de Pedro Sánchez. La operación para aprobar los presupuestos generales del Estado a cambio de más recursos para sus respectivos territorios, fue el resultado de una coreografía ensayada conjuntamente por la izquierda independentista catalana y vasca. Como pasó hace un año con la investidura de Pedro Sánchez. Un giro histórico en la política de alianzas del Gobierno que Gabriel Rufián bautizaba hace unos meses como "cambio de paradigma".