Pablo Hasel cumple este miércoles un año en la prisión, después de ser detenido por los Mossos, el 16 de febrero de 2021, en el Rectorado de la Universidad de Lleida (UdL) y trasladado por orden judicial al Centro Penitenciario de Ponent. En una entrevista en la ACN, Hasel explica que ha renunciado al programa de tratamiento penitenciario porque lo único que busca es el arrepentimiento, "el objetivo de la represión", dice. Por eso remarca que no quiere traicionar sus principios ni la causa por un indulto y considera "intolerable" que en una prisión gestionada por la Generalitat se le quiera hacer "un lavado de cerebro". El rapero leridano también ha criticado la "falsedad" de miembros de ERC y JxCat que lo han visitado y el inmovilismo de Unidas Podemos contra la represión.
Hasel asegura que después de un año encarcelado está "con más ganas de luchar y más fuerte" que antes y reitera que no se arrepiente de no haberse marchado al exilio. "La denuncia desde el exilio es útil, pero desde aquí también es muy necesaria. De hecho, la combinación es la clave para desenmascarar la falsa democracia del Estado", opina. El rapero leridano reconoce estar sorprendido de las cartas de apoyo que ha recibido a la prisión "de tantos lugares de todo el mundo" y lamenta que el centro penitenciario haya reducido las visitas personales "con la excusa de la covid". Explica que sigue escribiendo rape y poesía, aunque no puede grabar las nuevas canciones, "ni siquiera las que no son reivindicativas", porque, a diferencia de otros presos, no me dejan. "Esta es la libertad de expresión en una prisión de la Generalitat" lamenta.
También ha criticado que miembros de los grupos del Govern, ERC y JxCat, que lo han visitado, "me dijeron que querían ayudarme, pero, en la prisión controlada por ellos, me lo han puesto todavía más difícil". "Pasé casi cinco meses en aislamiento encubierto", explica.
Críticas en Unidas Podemos
Unidas Podemos tampoco se ha salvado de las críticas del rapero. El partido presentó una iniciativa para derogar los delitos contra la corona, contra los sentimientos religiosos o de escarnio público, las ofensas o ultrajes de palabra, por escrito o de hecho en España, sus autonomías o símbolos y emblemas, las injurias a instituciones del Estado y el enaltecimiento del terrorismo, pero Hasel considera que "no están presionando y con el gobierno actual del cual forman parte las leyes represivas se han ampliado".
Es por eso que entiende que si finalmente se consigue alguna cosa, será por|para la presión popular y no para|por Unidas Podemos que considera que "está incumpliendo sus promesas". Para desmovilizar a la gente dijeron que me liberarían y aquí estoy un año después. Vendiendo humo para ganar votos", lamenta.
Tratamiento penitenciario
Hasel también ha criticado que en el Estado no hay jueces "verdaderamente progresistas" y que por eso es muy difícil salir absuelto "por mucho que desmontes sus acusaciones". Con respecto a la decisión de la Audiencia Nacional, que se opuso a indultar al rapero, tal como pedía la Academia Catalana de la Música, argumentando que mostraba una "actitud antisocial", Hasel considera que "los antisociales son ellos que condenan a la gente a la miseria". Asegura estar "muy orgulloso" de oponerse a su modelo de sociedad y de luchar por el bienestar colectivo y para ayudar a la gente. "No conseguirán que me arrodille", asegura.
Sabe que si aceptara someterse al programa de tratamiento penitenciario, saldría antes de la prisión, pero dice que sería una libertad "falsa" porque entiende que no ha hecho nada malo. "El Govern dice que se opone a la represión, pero lo ejerce colaborando así con el fascismo", denuncia.
Finalmente, el rapero leridano asegura en la entrevista que la inmensa mayoría de daños materiales causados el día de su detención al Rectorado de la UdL fueron provocados por los antidisturbios de los Mossos d'Esquadra. "No habría pasado nada si la policía no me hubiera venido a encarcelar injustamente", dice, y lamenta que estén investigando personas que se manifestaron para darle apoyo. "Quieren atemorizar la solidaridad y no se puede permitir que las imputen, ya que se trataría de una grave vulneración sistemática de los derechos y las libertades más fundamentales", alerta.