El padre del niño de tres años asesinado el 17 de agosto del 2017 al atentado islamista de las Ramblas, Francisco Javier Martínez Espínola, ha reclamado una mejor atención y reconocimiento a las víctimas del terrorismo y hacer los protocolos "más humanos y empáticos", a la vez que ha exigido nuevamente a los diputados que desclasifiquen todos los documentos sobre los atentados que permanecen secretos para saber "la verdad" hasta el final. Martínez, que ha comparecido este martes en la comisión de investigación en el Congreso sobre los atentados, ha aseverado que su objetivo último es ver dónde se falló para que haya una prevención ante potenciales peligros de atentado en el futuro. "Todos sacarme beneficio de esto, para prevenir, para protegernos mejor", ha remachado para justificar la Comisión, sobre la cual ha afirmado que todo el mundo le ha dicho que no serviría para nada.
"Tratadnos mejor, somos juguetes rotos y no lo hemos elegido. Necesitamos empatía", ha aseverado Martínez Espínola esta mañana en la comisión parlamentaria en el Congreso, ante los representantes de algunos de los grupos parlamentarios —PP, PSOE, Vox, Sumar, ERC y Junts—. El padre del menor, que ha empezado su intervención enviando un abrazo a las otras víctimas y supervivientes y a los servicios de emergencias, ha reprochado a los parlamentarios que no hubiera una comisión política antes por abordar los atentados de Barcelona y Cambrils, y que sus resultados se pudieran aportar en el juicio. Y más concretamente, si bien en tono cordial, ha reprochado a los diputados presentes de PP y Vox que sus grupos parlamentarios votaran en contra de celebrar la comisión. Con el grupo de extrema derecha ha ido más allá y ha expresado su rechazo a un tuit que habrían hecho en el pasado utilizando una fotografía sensible del otro menor, de siete años, que murió aquel día en las Ramblas. En suma, Martínez Espínola ha sido crítico con la clase política, a quien ha censurado "cinismo" porque no ha sentido un interés en las víctimas y acompañamiento más allá de la presencia institucional en los actos conmemorativos anuales repitiendo "cada año lo mismo", si bien ha subrayado que a partir del cuarto año dejó de ir porque no aguantaba.
El padre del niño asesinado en las Ramblas ha denunciado que los protocolos de asistencia a las víctimas no fueron tan "correctos" y "humanos" como "tendrían que ser" y, en este sentido, ha señalado las "circunstancias políticas del momento", durante el 2017, como factor clave. Sobre esto, ha asegurado que autoridades de la oficina de atención a las víctimas del terrorismo del Gobierno de entonces le habrían "confesado" que "no habían estado lo suficiente" por ellos por este motivo. Con respecto a los protocolos, Martínez Espinola ha recordado que el juez instructor no permitió que las víctimas se vieran en las puertas de la Ciutat de la Justícia de Barcelona o que él entregó a su hijo muerto de sus brazos para que estuviera unos días para hacerle la autopsia, teniendo que esperar para enterrarlo. También ha denunciado que la primera vez que lo llevaron a declarar a juicio tuvo que estar esperando una salita pequeña al lado de los familiares de los terroristas y ha lamentado falta de "empatía". De igual forma, ha denunciado los trámites ha tenido que pagar de su bolsillo, habiéndose desplazado a Madrid en varias ocasiones para hacer papeleo, y ha dicho que la Audiencia Nacional no pagó los gastos de la gente que fue a declarar al juicio a petición de sus abogados.
Denuncia falta de acompañamiento a las víctimas por parte de la administración
Al mismo tiempo, Martínez ha denunciado que ninguna entidad para la atención a las víctimas del terrorismo de la administración pública le ha explicado sus derechos —de los cuales dice que se ha enterado hace pocos meses de algunos— o lo ha acompañado en los trámites burocráticos. En este sentido, ha dicho que se ha enterado hace poco de que la Audiencia Nacional tiene una oficina de atención a víctimas de terrorismo. El padre del menor asesinado también ha reclamado al Govern de la Generalitat que se ponga en marcha la oficina de atención a las víctimas de catástrofes que aprobó el Parlamento en el 2022, para ayudar con los trámites burocráticos y que sea un puente con las autoridades ministeriales. "Lo tenemos que hacer todos a través de otras víctimas que nos ayudan" y que se juntan en asociaciones porque "nadie los hace caso".
En este sentido, ha recordado que le dijeron pocos días antes del juicio que tenía que presentar una denuncia formal a la policía por la muerte de su hijo para que pudiera ser reconocido como víctima. También que la entonces alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, tuvo que enviar una carta al Gobierno a petición suya para que ampliaran el plazo de reconocimiento de víctimas, porque todavía no se habían identificado todas. Al respecto, ha reprochado la mala comunicación entre policías y jueces, ya que "cada ministerio tenía unas víctimas". En este sentido, de hecho, ha lamentado que muchas víctimas colaterales, como su hija mayor, que no estaba en las Ramblas aquel día, pero ha sufrido las consecuencias psicológicas, no han sido reconocidas en la sentencia. Y ha apuntado que ha faltado "identificar a todos los heridos y lesionados".
"Valientes" para desclasificar más documentos del 17-A: "Quiero saber cómo acaba la película"
Martínez Espinola ha afianzado que la sentencia de la Audiencia Nacional "tiene cosas muy buenas" y ha señalado en este sentido que reconoce "el derecho a saber la verdad" y a la "memoria histórica", y que el juez explicita que "las víctimas han sido las grandes olvidadas durante la instrucción". El padre del niño asesinado el 17-A ha aseverado que eso abre la puerta a reabrir la causa, porque "se ha juzgado, pero queda una parte abierta". "Seguimos pidiendo esta investigación, esta verdad, que se acabe de investigar lo que falta", ha subrayado Martínez, y ha apuntado a quién llevaba la furgoneta que salió de Alcanar después de la explosión y que habrían visto a los vecinos con una camiseta del Barça o ha puesto interrogantes sobre las pruebas biológicas que habrían probado la muerte del imán de Ripoll —como también hizo su abogado en la misma comisión hace unos días—. Es por este motivo que el padre del menor muerto ha defendido que hay que desclasificar el resto de documentos que quedan secretos: "Es como si vas al cine y a media película cortan y dicen que el resto es secreto. Quiero saber cómo acaba la película", ha apuntado, y ha instado a los diputados a ser "valientes" y propiciarlo. Finalmente, ha apuntado que quiere "averiguar, ver qué falló, para qué hay que mejorar, como la coordinación entre policías, que no existía". Al respecto, ha rechazado también que lo tilden de "conspiranoico" y ha denunciado mensajes que "hacen daño" a las redes instándolo a dejarlo estar y marcharse "a llorar a casa".
La diputada de Juntos Pilar Calvo ha instado Martínez a pronunciarse sobre la comparecencia de Mohamed Houli Chemlal, uno de los yihadistas condenados por el 17-A que el pasado 13 de febrero en el Congreso aseguró que el CNI sabía que el imán de Ripoll planificaba un atentado. Martínez ha apuntado que "ojalá" Houli explicara "cómo se radicalizó, qué pasó, qué falló, qué actores sociales estuvieron implicados en el tema" y ha recalcado que en la causa "hay cosas que rechinan mucho".
En suma, Martínez Espinola ha reafirmado que él quería esta comisión para conseguir una mejor protección ante el terrorismo y para que haya "una conclusión positiva". "Quiero que la muerte de mi hijo sirva para alguna cosa buena", ha concluido. "Personas que han venido a esta comisión y en el juicio dijeron que no habían hablado nunca con el imán, al final dijeron que sí", ha aseverado el compareciente, que ha apuntado a una posible descoordinación policial en relación con atentados: "Quiero creer que si alguien tenía alguna información no la compartían toda, pero espero que hoy sí que la compartan". "Si hay alguna cosa que pueda a ayudar a saber esta verdad. Aunque no se haga público, que sirva para alguna cosa. Las víctimas estamos contentas con la comisión. Nos dijeron que no servían para nada, pero para mí sí sirve mucho", ha concluido. Después de él, ha comparecido la psicóloga forense y presidenta de la Unidad de Atención y Valoración en Afectados miedo Terrorismo, Sara Bosch.