Nueva astracanada del enfant terrible del PSOE. Emiliano García-Page se ha pronunciado este jueves sobre el acuerdo alcanzado entre el Gobierno y Bildu para reformar la ley mordaza, y lo ha hecho haciendo referencia al pasado de la izquierda abertzale y su vínculo con la lucha armada. "Si se sacaran ellos la mordaza y pudieran de una vez pedir perdón y reconocer el dolor de las víctimas ya sería suficiente", ha aseverado al presidente castellanomanchego cuando ha sido preguntado por los periodistas sobre una de las noticias del día. El barón socialista no se ha quedado aquí: "Está muy bien que el pacto sea con una organización que se dedicó a ponerle mordaza al pueblo vasco durante tantos años".

Emiliano García-Page, el barón socialista más crítico con Pedro Sánchez desde que el aragonés Javier Lambán perdió su trono autonómico en las pasadas elecciones del 28-M, volverá a ser noticia precisamente este viernes. El presidente del Gobierno celebrará en el palacio de la Moncloa una nueva ronda de reuniones con presidentes de comunidades autónomas. Se reunirá primero con el murciano Fernando López Miras (PP), después lo hará con el valenciano Carlos Mazón (PP) y cerrará la ronda con el manchego Page (PSOE). La intención del máximo líder socialista es abordar en estas reuniones bilaterales la cuestión de la financiación autonómica; y Page ha mantenido hasta ahora la misma línea que el partido capitaneado por Alberto Núñez Feijóo: disparar a diestro y siniestro contra la financiación singular para Catalunya pactada entre ERC y PSOE.

Reforma de la ley mordaza

Este jueves, Bildu ha anunciado que ha cerrado con el Gobierno un acuerdo para reformar la ley mordaza y retocar los aspectos más polémicos de la norma aprobada por el ejecutivo de Mariano Rajoy: se prohibirá el uso de las pelotas de goma por parte de la policía, y se abordará la desobediencia a los agentes, así como la devolución en caliente de inmigrantes. La portavoz del grupo parlamentario de la izquierda abertzale en el Congreso de los Diputados, Mertxe Aizpurua, ha explicado que su formación ya ha trasladado el acuerdo a todos los socios de investidura de Pedro Sánchez, con la intención de que el documento tenga el máximo de firmas posibles. ERC ya ha confirmado que el texto llevará firma republicana. La formación, de hecho, se ha "felicitado" por el acuerdo, porque el pacto PSOE-Bildu incluye exigencias expuestas por Esquerra en la pasada legislatura. Junts per Catalunya, partidario de derogar la ley, no ha dado por hecho todavía su 'sí' y ha asegurado que ahora le toca "negociar".

Los detalles del acuerdo

Tal como figura en el documento pactado entre ambas partes, se acaba con las pelotas de goma, que serán sustituidas por otros medios menos lesivos. Aizpurua ha explicado en rueda de prensa que el pacto se limita a eso —únicamente a prohibir las pelotas de goma— por lo que se abre la puerta a sustituir este material por las balas de foam. Por otra parte, el acuerdo estipula que "en el plazo de seis meses" se sacará adelante la modificación de la ley de extranjería para revisar las devoluciones en la frontera.

En el acuerdo se pone punto final también a la discrecionalidad que hay en las sanciones por falta de respeto a la autoridad y, a partir de ahora, estas tendrán que ser objetivables y justificadas; una manera de eliminar la subjetividad de estas. Las sanciones se cancelarán en caso de que la persona sancionada se retracte. Y las sanciones por desobediencia pasarán de falta grave a falta leve. El documento prevé que "la infracción tiene que ser manifiesta, clara y objetivable, y será sancionable solo cuando esté ajustada a una orden legal, ajustada a la legalidad o al ordenamiento jurídico, impidiendo la discrecionalidad sobre requerimientos y sanciones".