Hoy han tenido lugar todos los trámites. A primera hora de la mañana, la vicepresidenta Yolanda Díaz y la ministra Ione Belarra han prometido sus nuevos cargos ante el rey Felipe VI. Posteriormente se han dirigido a la sede del Ministerio, donde se ha producido el traspaso de carteras por parte de Pablo Iglesias, que ya no es vicepresidente segundo del Gobierno. Seguirá siendo el secretario general de Podemos y el candidato de su formación en la Comunidad de Madrid. Pero ya no está en La Moncloa. ¿Cuál será su papel a partir de ahora? ¿Cuál será su interlocución con Pedro Sánchez? Hasta ahora, los momentos más tensos los han resuelto entre Sánchez e Iglesias. A partir de hoy se abre un nuevo periodo en sus relaciones, todavía por definir.

El mismo Pablo Iglesias ha admitido este miércoles que Unidas Podemos pasa de un hiperliderazgo a un "liderazgo coral". En una entrevista en la Cadena SER, el ya exvicepresidente español ha subrayado que seguirá siendo el secretario general de Podemos "el tiempo que toque" y que mantendrá la interlocución con el presidente Pedro Sánchez, con quien ha construido una "confianza especial", aunque el diálogo dentro del ejecutivo central recaerá en la nueva vicepresidenta tercera, Yolanda Díaz. Se ha vuelto a mostrar convencido de que Díaz "será la próxima presidenta del Gobierno y llevará a Unidas Podemos más lejos de lo que lo he hecho yo".

Pero desde el PSOE se lo miran con recelo. La vicepresidenta primera, Carmen Calvo, ha querido marcarle los límites. "Ya no está en el gobierno", ha recordado la dirigente socialista en una atención a los medios. "El señor Iglesias es ahora el líder de un partido que está presente en el gobierno de coalición y que hablará cuando corresponda y sea necesario objetivamente con el secretario general del PSOE, que es el presidente del Gobierno," ha insistido Calvo. Por otra parte, ha asegurado que "seguirán avanzando" para cumplir los acuerdos de coalición, pero que eso "no significa que uno de los dos partidos imponga al otro estrictamente sus criterios". Cumplir los acuerdos, ha concluido, quiere decir "sentarse una vez, otra y otra hasta que el acuerdo se alcance".

Así, habrá que ver cómo se redefine el papel de Pablo Iglesias, especialmente después de las elecciones madrileñas del 4 de mayo. El vicepresidente saliente no sólo ha asumido hasta ahora la cartera de Derechos Sociales, sino también el liderazgo de la agenda política. En cambio, Yolanda Díaz se ha centrado en su cartera de Trabajo, en los temas sectoriales, y ha pasado de puntillas por otros asuntos, como podría ser el conflicto político catalán o la monarquía.

A partir de hoy, Nadia Calviño ha pasado a ser la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz la vicepresidenta tercera y Ione Belarra la ministra de Derechos Sociales. Díaz y Belarra han recibido la cartera de manos de Iglesias en la sede del Ministerio. La imagen de tres mujeres en el Palacio de La Zarzuela ha sido muy potente. Ahora el Consejo de Ministros tiene más mujeres que hombres.

Belarra promete regular los alquileres

Especialmente interesante ha sido el discurso de la nueva ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, que en su etapa de secretaria de Estado de Agenda 2030 había dado mucha guerra. No sólo cargaba contra la ministra Margarita Robles por ser aplaudida por la derecha, sino que también ha participado en negociaciones como las de la nueva ley de vivienda, todavía atascada. En su parlamento después del traspaso de carteras, Belarra se ha comprometido a hacer cumplir el acuerdo de gobierno de coalición. No ha pasado de puntillas por ningún asunto, asegurando que "pinchará de una vez por todas la burbuja" de la vivienda y "regulará los alquileres como señala el acuerdo de gobierno". Tanto Díaz como Belarra han dedicado parte de sus discursos a elogiar el papel de Pablo Iglesias en el ejecutivo central.