La jueza de Instrucción número 19 de Madrid ha citado para el próximo 20 de mayo en calidad de investigado a Alberto González Amador, pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. González tendrá que declarar por la presunta comisión de dos delitos de defraudación tributaria y un delito de falsedad en documento mercantil. La citación se produce después de que la magistrada haya incoado diligencias contra el empresario y cuatro personas más en relación con la denuncia formulada por el Ministerio Fiscal, recaída en este órgano judicial por turno de reparto.
La investigación se centra en los supuestos indicios delictivos sobre hechos relativos al impuesto de sociedades correspondientes a los ejercicios de los años 2020 y 2021 y de un presunto delito de falsedad en documento mercantil al haber aportado unas facturas que no se corresponden con servicios realmente prestados y aportados con la finalidad de minorar la cuota tributaria a satisfacer. La misma jueza incluye en el auto que supuestamente y "a consecuencia de estas conductas defraudatorias, el contribuyente ha dejado de ingresar en la Hacienda Pública estatal por el impuesto de sociedades del 2020 una cuota de 155.000 euros y por el impuesto de sociedades de 2021, una cuota de 195.951 euros, delitos penados en el artículo 305.1 del Código Penal en concurso medial con un delito de falsedad en documento mercantil, del artículo 392.1 en relación con el artículo 390 del Código Penal".
Todo nace de un informe de la Agencia Tributaria que advertía de un presunto fraude fiscal detectado en las cuentas de González. Entonces, la Fiscalía empezó a investigar los hechos. "Gastos que no se corresponden con servicios realmente prestados y todo eso con la finalidad de ingresar en el erario público menor cantidad que le correspondía abonar por el Impuesto de Sociedades de los Ejercicios 2020 y 2021", recoge la denuncia del fiscal.
Una persecución, según Ayuso
Aunque, finalmente, el caso de González llegará ante los tribunales, la defensa de la pareja se ha centrado en denunciar que todo era una persecución política. En sus primeras declaraciones públicas, Ayuso sostuvo: "Primero fue mi padre, después mi hermano, mi madre, mis primos, mi pueblo, mi barrio, mi escuela, mis profesores y mi expediente. Después fue mi etapa universitaria. Siempre ha sido buscar alguna cosa en mi entorno. Ahora tocaba el novio".
Sin embargo, el mismo González había dejado ya por escrito una confesión de los hechos. Concretamente, el empresario envió a través de su abogado un correo donde reconocía: "Ciertamente, se han cometido dos delitos contra la Hacienda Pública". El correo electrónico fecha del 2 febrero, mucho antes de que el caso estallara a los medios.