El independentismo ha hecho constatar su pérdida de mayoría en el Parlament de Catalunya. Y es que la cámara catalana ha rechazado la propuesta de resolución pactada entre Junts, ERC y la CUP de denunciar la "rebelión" de la cúpula judicial con la amnistía, con el voto en contra del PSC y la abstención de los Comuns. Los partidos independentistas habían acordado previamente que el Parlament votara "denunciar la rebeldía de la cúpula del poder judicial español al no aplicar, de manera deliberada y arbitraria, la ley de amnistía," hecho que obligaba al PSC a posicionarse. Y es que el redactado incorporaba fragmentos que podían ser delicados para los socialistas, como: "todo, confirma la existencia de graves carencias democráticas y el sesgo político de parte del estamento judicial español".

Asimismo, el Parlament también ha rechazado el punto impulsado por Junts per Catalunya en el cual insta el Govern a que exija el cumplimiento íntegro de la ley de amnistía y "emprenda acciones legales pertinentes ante todas las instancias necesarias contra todas las autoridades judiciales que se nieguen a aplicar la ley de amnistía". Asimismo, el Parlament ha tumbado una propuesta de resolución de ERC que defendía un referéndum de independencia "reconocido y acordado" como la "mejor herramienta" para resolver el conflicto político y decidir el futuro colectivo de Catalunya. Por otra parte, el Parlament también ha tumbado una propuesta de Junts que quería constatar que la cámara ha avalado, en 24 ocasiones, mociones o resoluciones a favor del derecho a la autodeterminación.

El Parlament sí pide el cumplimiento íntegro de la amnistía

En otra propuesta de resolución impulsada por los Comuns, el Parlameno ha expresado este jueves su apoyo a la Ley de Amnistía y ha reclamado a los jueces su aplicación "sin más dilaciones ni arbitrariedades para respetar la voluntad del legislador". En la tercera y última sesión del Debate de Política General (DPG), ha sacado adelante esta propuesta de resolución de los Comuns sobre la amnistía, que ha recibido el apoyo de todos los grupos, excepto PP y Vox.

La cámara también ha rechazado una propuesta de ERC que quería constatar la necesidad de no normalizar las relaciones institucionales de Catalunya con la casa Real, atendiendo "el amplio rechazo" que suscita la Monarquía española a la sociedad catalana, que no reconoce al rey, y basado principalmente en la defensa de un estado en forma de República "sin privilegios ni instituciones anacrónicas herederas del franquismo", y en el papel parcial de Felipe VI el 3 de octubre de 2017. De hecho, en esta línea, también ha rechazado otro texto del grupo de Albert Batet, que quería instar al president del Govern, Salvador Illa, y todo el ejecutivo a no normalizar la relación con la monarquía española hasta que Felipe VI "rectifique y pida disculpas".

ERC y CUP rechazan la DUI del 2017, a propuesta de Alianza

Uno de los momentos también notorios de este jueves por la tarde en el Parlament es cuando los diputados han tenido que votar una propuesta de resolución de Aliança Catalana para restituir formalmente "el Estado Catalán" como "Estado independiente y soberano, de derecho, democrático y social", en el marco de la Declaración de Independencia aprobada por el Parlamento el 27 de octubre de 2017. A pesar de que la Mesa del Parlament había rechazado esta mañana una petición de reconsideración del PSC y otra de Vox para que no se admitiera esta propuesta, el Parlament ha rechazado la iniciativa del partido islamófobo. Y es que a banda de que el independentismo ya no tiene mayoría absoluta en la cámara, Esquerra Republicana y la CUP han decidido votar en contra. El argumento? Consideran que es un partido de extrema derecha y no se tiene que avalar ninguna propuesta que venga de sus manos. En cambio, Junts per Catalunya se ha abstenido en esta votación, que provoca que sea la primera vez que la cámara catalana rechace la declaración de independencia del 2017.

De hecho, todo ello ha provocado una lluvia de reproches, una vez ha acabado el pleno, entre los partidos independentistas. Un ejemplo es como la diputada de ERC y vicepresidenta del Parlament, Raquel Sans, ha acusado los juntaires de romper el cordón sanitario contra "la extrema derecha" de Aliança Catalana. En cambio, desde Junts se considera que ha sido un error llevar esta propuesta a debate -como también, dicen, ha estado llevar la propuesta de un referéndum por parte de ERC- porque proyecta una imagen de nueva derrota del independentismo.