El Parlament ha convalidado este jueves el decreto del Govern sobre los alquiler de vehículos en conductor (VTC), que fija un plazo de 15 minutos de precontratación. Lo ha hecho de manera muy amplia con los votos a favor de JxCat, ERC, PSC, comunes y la CUP. Sólo Ciudadanos y PP han posicionado en contra.
De hecho, el partido naranja había intentado detener el debate amparándose en el informe desfavorable del Consejo de Garantías Estatuarias al decreto -pedido por ellos mismos- pero que no ha conseguido. El dictamen, que considera que el decreto no se adecuaba a a los principios de adecuación, necesidad y proporcionalidad, no es vinculante.
El debate parlamentario ha arrancado, pues, con la presentación del decreto por parte del conseller de Territorio y Sostenibilidad, Damià Calvet, que ha defendido que las empresas de VTC habían "invadido" el sector del Taxi. "Els VTC no son taxis", ha afirmado, añadiendo que son dos servicios que tendrían que ser "complementarios" pero no "competidores".
Por todo eso, ha defendido el decreto y ha anunciado que ya se está trabajando en una nueva ley de regulación de movilidad que empezará a tramitarse en el Parlament el próximo mes de abril. Calvet ha negado que el Govern esté en contra de la modernización y que la marcha de Uber de Barcelona sea un "mal mensaje para los emprendedores.
En este sentido, el conseller ha alertado de la gran concentración de licencias VTC de unas pocas empresas y ha avisado de que eso lleva a un "abuso de posición" y que "puede llegar a hacer cautivo el cliente de precios abusivos". "Si no pivotamos las reglas del juego nos las impondrán", ha defendido en este sentido.
PSC, comunes y la CUP han celebrado el decreto, a pesar de considerar que podía haber sido más ambicioso, pero han votado a favor y se han emplazado a trabajar en la nueva ley que llegará en los próximos meses al Parlament. Por lo contrario, Ciudadanos ha tachado el decreto de "increíble, peligroso e irresponsable", lo consideran una "barbaridad jurídica y un despropósito para la ciudadanía" y han asegurado que "perjudica la innovación tecnológica". El PP también se ha sumado a la crítica y al voto desfavorable.
Representantes del sector del Taxi y de las VTC han seguido el debate desde el hemiciclo, mientras fuera de la cámara había una concentración de algunos centenares de trabajadores de las VTC contrarios al decreto.