El Parlament baja del tren. El año pasado, en el servicio de Rodalies de Catalunya, hubo una incidencia grave en 284 de los 365 días. Es decir, cuatro de cinco días. Así lo constatan los mismos informes oficiales de Adif, que se han debatido este jueves en el Parlament de Catalunya. Y la cámara catalana ha señalado a la máxima responsable, la ministra Raquel Sánchez, a quien ha reprobado con los votos de ERC, Junts per Catalunya y la CUP. El texto aprobado por el hemiciclo también reclama el traspaso "integral, inmediato y real" del servicio, así como la cesión de la infraestructura y apuesta por la creación de una comisión de investigación para "valorar los costes económicos y sociales, cuantificar el déficit de inversión y las necesidades de inversión y aclarar las responsabilidades políticas y técnicas que han llevado a la situación actual". El PSC y la derecha ha votado en contra, mientras los comunes se han puesto de perfil: han votado por el traspaso, pero se han abstenido en la reprobación de Sánchez.
Se trataba de una moción registrada por ERC, que ha defendido el diputado republicano Ferran Estruch. Ha empezado poniendo sobre la mesa los datos oficiales de Adif del 2022. Las incidencias del 2022 se tradujeron en más de 100 minutos de retrasos acumulados, más de 2.000 trenes de Rodalies cancelados, 17.667 afectados por retraso y 3.933 trenes de media distancia también afectados por retrasos.
"Rodalies funciona muy mal y afecta a la vida de nuestros vecinos y vecinas", ha denunciado Estruch. Ha señalado dos causas: "La infrafinanciación crónica y la mala gestión de los diferentes gobiernos españoles, del PP y del PSOE". El diputado de Junts, Ramon Tremosa, ha agradecido la aceptación de las enmiendas. Pero ha enviado un encargo a ERC: "En las elecciones del 23-J podemos volver a tener posibilidad de condicionar investiduras. Cobrad por adelantado. No regaléis más investiduras ni presupuestos de buen rollo". En la misma línea, la diputada cupera Montse Vinyets: "No solo reprobamos a la ministra por la mala gestión, sino por utilizar fondos Next Generation para desguazar vías de trenes, por sacar del centro de Figueres su estación y por otras obras como ampliación del aeropuerto, de carriles de la AP7 o el Quart Cinturó". También David Cid, de los comunes, ha constatado que la gestión del Ministerio no ha sido buena y que aspiran a que no sea titular el PSOE tras el 23-J.
En este contexto, la moción transaccionada entre ERC y Junts constata que la "responsabilidad" es del Gobierno y reprueba a la ministra de Transportes y exalcaldesa de Gavà, Raquel Sánchez, "por la constante ineficacia en la gestión del servicio de RENFE y ADIF en Catalunya, como también la incapacidad para adoptar medidas para hacer frente a las incidencias y la afectación diaria en la calidad del servicio y la movilidad de las personas viajeras". El texto también reclama el "traspaso del servicio ferroviario de Rodalies y la cesión de la titularidad de las infraestructuras que puedan ser segregadas de la Red Ferroviaria de Interés Generales dentro de Catalunya". Y la creación de una "comisión de investigación sobre el servicio los últimos años" que aclare responsabilidades "políticas y técnicas".
El PSC culpa al PP
Los socialistas son los responsables de la gestión del servicio de Rodalies, por los titulares del ministerio de Transportes. Pero el diputado del PSC, Jordi Terrades, se ha sacudido las responsabilidades. "No hemos negado nunca los problemas y hemos trabajado para dar soluciones efectivas", ha defendido el diputado. No obstante, ha rebatido que los problemas "vienen motivados" de los gobiernos españoles del PP, que "no invirtieron lo suficiente en la red ferroviaria de Catalunya". En este sentido, Terrades ha contrapuesto que "Pedro Sánchez cumple con el sistema ferroviario catalán, con Rodalies y con el corredor mediterráneo". Ha señalado como ya se ha ejecutado un tercio de las inversiones previstas hasta el año 2025.