El caso de Sílvia Orriols, líder de Alianza Catalana y alcaldesa de Ripoll desde el pasado mes de junio después de ganar las elecciones municipales, ha aterrizado en el Parlament de Catalunya. Lo ha hecho a través de una moción de Esquerra Republicana sobre la defensa de los ciudadanos y la democracia en todos los Països Catalans, que la cámara ha aprobado de manera muy amplía, con el apoyo de PSC, ERC, Junts, la CUP y los comunes. Uno de los puntos de esta moción reza "hacer un llamamiento a las fuerzas políticas de la ciudad de Ripoll para no normalizar la acción política de la extrema derecha en la ciudad". Al mismo tiempo, también pide a los partidos de la capital del Ripollès que hagan un cordón sanitario a Orriols, pidiendo "dialogar y encontrar consensos para minimizar su presencia en las instituciones". Orriols llegó a la alcaldía después de que el resto de partidos no alcanzaran un acuerdo para presentar una candidatura alternativa.
La CUP pide una moción de censura para quitarle la alcaldía a Sílvia Orriols
Marta Vilalta, portavoz de ERC y encargada de defender la moción, ha denunciado que Alianza Catalana gobierna en Ripoll "desde la criminalización de los ciudadanos y atentando contra la cohesión social". Por eso, ha pedido a los partidos democráticos que lleguen a acuerdos para "echar a la extrema derecha del Ayuntamiento". Este mes de julio, el perfil oficial de la institución en Twitter publicó un tuit con la fotografía de un inmigrante sin techo durmiendo en un parque de la ciudad, informando de que había sido entregado a la Policía Nacional.
A raíz de este tuit, la CUP, uno de los partidos que había llegado a un acuerdo de izquierdas junto con Esquerra y el PSC para evitar la alcaldía de Orriols, ya ha pedido una moción de censura contra la alcaldesa. Y este jueves, la diputada de la CUP en el Parlament, Dolors Sabater, ha reiterado que su partido está "totalmente dispuesto a hacer todo lo posible en Ripoll para que la extrema derecha no siga en el poder ni un minuto más", remarcando que hay que promover la moción de censura ante hechos como el tuit del inmigrante sin techo: "Esto es el paso previo a una campaña de odio", ha advertido Sabater.
Catalunya para detener la derecha en España
Por otra parte, Alícia Romero también ha lamentado que la extrema derecha haya entrado en varias instituciones y se la haya normalizado. Hoy tenemos a Alianza Catalana gobernando porque hemos sido incapaces de ponernos de acuerdo", ha apuntado la diputada socialista en referencia al fracaso de las negociaciones entre Junts y ERC, PSC y la CUP en la capital del Ripollès. Con todo, la portavoz del PSC ha centrado su intervención en sacar pecho por los resultados de las elecciones generales en Catalunya, celebrando que en el país la derecha y la ultraderecha solo se hicieron con 8 de los 48 diputados que se repartían, lamentando a la vez que el PP haya comprado el discurso de Vox sin despeinarse y poniendo el ejemplo de un Ayuntamiento liderado por los populares que quiere eliminar el nombre de Marcelino Camacho de una plaza.
Por su parte, Jessica González, ha advertido que la voluntad de Sílvia Orriols es llevar a cabo una guerra cultural, motivo por el que "hay que ganar la batalla de las emociones", ante los discursos de ultraderecha que llegan de forma masiva a las clases trabajadoras, cosa que explicaría su auge.