El Parlament ha validado hoy el decreto de la prórroga presupuestaria después de haber empezado en el 2024 con los presupuestos del 2023, aprobados en marzo con el apoyo de PSC y los comunes, prorrogados. La mayoría que dio apoyo a los del año pasado, formada por ERC, los comunes y el PSC han validado este decreto presentado por la consellera Natàlia Mas, mientras que Junts se ha abstenido y la CUP, que este año sí que ha entrado en las conversaciones con el Departament de Economia para dar apoyo a las cuentas ha decidido votar que no, ya que si bien se trata de un decreto técnico, los anticapitalistas defienden que se trata de una cuestión política que "posterga unas apuestas determinadas de los presupuestos anteriores" que no comparten. A pesar del apoyo de estos grupos parlamentarios, tanto Junts como el PSC y los comunes, han aprovechado la ocasión para criticar que el Gobierno no consiguiera aprobar en tiempo y forma los presupuestos del 2024 (cosa que solo ha pasado dos veces en los últimos 14 años) y en el caso de PSC y comunes han cargado contra la baja ejecución de los pactos, hecho que les hace perder, tal como han denunciado desde el Parlament, la confianza en el Govern de Aragonès de cara a las cuentas de este año.
En su intervención inicial, la consellera Natàlia Mas ha subrayado la importancia de validar este decreto aunque ha advertido que el Gobierno "tiene la confianza" de llegar a un acuerdo para los presupuestos de este año, reconociendo, eso sí, que "el ideal" habría sido empezar en el 2024 con el trabajo hecho. Según ha señalado, el Departamento tiene apunte las cuentas desde hace semanas, aunque estos todavía no han visto la luz: "Son unas cuentas que permitirán elevar el gasto y la inversión para seguir reforzando los servicios públicos", ha celebrado. Mas se ha referido en los cuatro grupos políticos con el cual el Govern ha abierto conversaciones para aprobar las cuentas de este año: al PSC y los comunes, socios en la última aprobación, les ha recordado que buena parte de las medidas pactadas entonces ya se han cumplido o han iniciado los trámites; en Junts, que los proyecto de presupuestos incluye elementos como la reducción fiscal en el IRPF que el partido defiende; y en el caso de la CUP les ha agradecido la predisposición subrayando las coincidencias de los dos partidos en la agenda social. Marta Vilalta, que ha intervenido en nombre de ERC, también ha subrayado la voluntad del parido para que el acuerdo para las cuentas sea "el más amplio posible".
La prórroga, un "fracaso" del Govern según los comunes
A pesar de este planteamiento de Mas, el resto de grupos a los cuales se ha referido no ve la situación igual que la consellera. Alícia Romero, portavoz del PSC ha lamentado que se haya tenido que hacer una prórroga presupuestaria a pesar de los "ofrecimientos" de su grupo, que ha "alargado la mano continuadamente aunque no siempre se nos tiene en cuenta". "A nosotros nos gusta hacer política útil y ayudar al país a resolver los problemas que tiene y afrontar sus retos. No queremos salvar el Govern sino pensar en el país", ha insistido la socialista, lamentando que aprobar las cuentas no haya sido una "prioridad del Executiu". Como ha ido haciendo en las últimas semanas, Romero ha remarcado que el PSC no está satisfecho con el cumplimiento de las medidas del 2023, y que solo ejecutante los pactos, el Govern podrá tener la confianza de su partido.
Joan Carles Gallego, en nombre de los comunes, se ha pronunciado de una manera muy similar a Romero, aunque en todo momento ha dejado claro que su formación votaría a favor de la validación de un decreto que ha descrito como "necesario". Con todo, ha recordado que este se ha tenido que aprobar porque todavía no hay presupuestos, hecho que "no es un drama", ya que ha sido habitual en los últimos años, pero sí "un fracaso y una irresponsabilidad del Govern": "Es responsabilidad suya la incapacidad para liderar esta construcción del consenso con otros grupos políticos. Aquí está donde está el problema", ha señalado Gallego, que como Romero ha enfatizado que hay que recuperar la confianza" en el Execuitu para saber que aquello que se pacta es lo que se acabará ejecutando.
Un "Govern que arrastra los pies y que no lidera"
Mònica Sales, portavoz de Junts, partido que el año pasado se alejó del Govern en la aprobación de los presupuestos, también ha hurgado en la herida constatando que han pasado más de seis meses desde que se publicó el orden de elaboración de las cuentas y que estos todavía no han sido aprobados. "Al fin y al cabo demuestra que es un Govern sin rumbo que tampoco cumple en materia presupuestaria y que ha sido incapaz de llegar a un acuerdo con ningún grupo parlamentario". Es excepcional la falta de liderazgo del Govern para llegar a acuerdos", ha lamentado la juntaire desde el atril de la cámara catalana, asegurando que el de Aragonès es un "Govern que arrastra los pies y que no lidera" ante las principales necesidades del país. Salas ha insistido así en el hecho que las cuentas tienen que ser "más que un excel" y tienen que reflejar el modelo de país que quiere el Executiu, motivo por el cual su partido trabaja con un documento que recoge sus prioridades.