El PDeCAT exige la comparecencia del ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación y Unión Europea, Josep Borrell, así como del embajador de España en los Estados Unidos, Pedro Morenés, tras la tensión vivida esta madrugada en el país norteamericano con el president de la Generalitat, Quim Torra, durante la recepción oficial en Washington que la organización del Smithsonian Folklife Festival dio anoche a las delegaciones de Catalunya y Armenia. Los discursos de contenido enfrentado de Torra y Morenés, y la tensión política vivida en el interior acabó con la delegación catalana abroncando al embajador y clamando por la libertad de los "presos políticos" y abandonando el acto en pleno, con Torra al frente.
En este sentido, el diputado demócrata, Jordi Xuclà, ha pedido sendas comparecencias para explicar el motivo por el cual el embajador pronunció un "discurso político", de "contraprogramación", algo que Xuclà ve "fuera de sus competencias", al rebatir al presidente de la Generalitat. "Si añora su etapa política, que se presente a elecciones", se ha jactado el diputado catalán. "Los embajadores están al servicio de los ciudadanos y los representados electos", ha subrayado.
Aun así, la vicepresidenta del Ejecutivo, Carmen Calvo, ha salido en defensa de Morenés por el uso del término "presos políticos" al considerar que no los habría en el Estado, en referencia al juicio por el 1-O. "Este tipo de situaciones no convienen a la imagen de España. Es evidente que nadie, y menos un cargo público, puede hablar de presos políticos porque deteriora la democracia española, que está al frente de las democracias europeas", ha denunciado Calvo en una entrevista en Los Desayunos de TVE. "Es conveniente que nadie diga lo que no es real y lo que no es legal, que en España hay "presos políticos", ha zanjado.