Pedro J. Ramírez ha sacudido una buena trompada, otra, a Mariano Rajoy y a su ministro de Exteriores, Alfonso Dastis, a quienes culpa de la "nula influencia [de España] en Europa" y, en consecuencia, que "Bélgica, Alemania, Reino Unido y Suiza nos den la espalda a la vez", en referencia al calvario judicial por el que, de momento, atraviesan las euroórdenes emitidas contra el presidente Puigdemont y los consellers en el exilio.
"Eso es lo que pasa cuando un presidente de gobierno estafermo elige como ministro de Exteriores a alguien que ni siquiera puede hacerle sombra a él", concluye en su estilo barroco el vídeoeditorial de El Español, el diario que dirige, una de las referencias mediáticas del nacionalismo español. "Está claro: el problema es nuestro, y no por lo que pasa en Catalunya, sino por lo que todavía no ha pasado en España", acaba misteriosamente.
"Cuando Bélgica, Alemania, Reino Unido, Suiza... nos dan la espalda a la vez, quizás resulta que el problema es nuestro", arranca su catilinaria. Pedro J. salva al Tribunal Supremo y al juez Llarena, "que han modulado sus pasos con inteligencia y rigor". Después vuelve a insistir en uno de sus argumentos clásicos: "estando tan en mantillas el espacio judicial y policial europeo nunca debió permitirse la fuga de los golpistas tras la proclamación unilateral de independencia. Y ni siquiera han rodado cabezas por ello".