La improvisada visita privada que efectuó el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al hospital de Sant Pau el lunes pasado, con la única intención de visitar a un antidisturbios herido, comportó el bloqueo de los accesos a urgencias durante al media hora que duró una visita que el hospital consideró de carácter privado.
Así lo ha explicado la consellera de Salud, Alba Vergés, en declaraciones al programa No lo sé la de Rac1, después de que Sánchez criticara que la dirección no lo hubiera recibido. La consellera ha asegurado que la visita fue considerada privada tanto por el hecho de que se enteraron "por un tuit de Pedro Sánchez", como por el hecho de que el motivo era el de visitar a una persona ingresada, en concreto un policía descerrajo, y "se interpretó que era una visita privada"
Además, la consellera ha criticado que el presidente español accediera al hospital por el servicio de Urgencias, donde "dejó el coche en medio", cosa que supuso que "durante más de media hora no pudo entrar ni salir ninguna ambulancia". "Es una falta de respeto total, estamos hablando de un hospital", ha añadido la consellera.
Asimismo, Vergés ha asegurado que entendía que no le gustara el regañado recibimiento por parte de los trabajadores del centro hospitalario, pero recordó que eso se produjo después de una visita a la jefatura de la Via Laietana -sin tener ánimo para encontrarse con el presidente de la Generalitat, a pesar de los 600 metros que les separaban- y "yendo a diferentes hospitales" a visitar sólo a "los suyos".