¿Qué se sabe hasta ahora del CatalanGate y Pegasus? La noticia sobre el espionaje a políticos y otras personalidades de Catalunya y el Gobierno se ha hecho dado a conocer a través de un informe del centro de investigación canadiense Citizen Lab, donde se indicaba que al menos 65 personas del entorno independentista habían estado espiados con el programa israelí Pegasus. Entre los espiados figuran presidentes de la Generalitat, diputados, políticos, periodistas, activistas y abogados. El caso de espionaje ha llevado al Gobierno a estar en la cuerda floja por su presunta implicación. Actualizamos todo lo que tienes que saber sobre el caso de espionaje del CatalanGate y Pegasus y las últimas informaciones conocidas.
CatalanGate y Pegasus, última hora sobre el espionaje
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, presentará una querella contra la exdirectora del CNI Paz Esteban y contra NSO Group, la empresa responsable de Pegasus, por el caso de espionaje contra responsables del movimiento independentista conocido como CatalanGate.
La querella interpuesta por el abogado Gonzalo Boye por el presunto espionaje con el software *Pegasus del cual ha estado víctima ha sido admitida a trámite parcialmente, según el escrito del juzgado de instrucción número 29 de Madrid. La jueza desestima la parte de la denuncia dirigida a personas físicas y jurídicas contra las cuales Boye pedía investigación, Niv Karmi, Omri Lavie y Shalev Hulio como personas físicas y NSO Group Technologies, OSY Technologies y Q Cyber Technologies como jurídicas.
El juez de la Audiencia Nacional que instruye la causa por el espionaje a miembros del gobierno español con Pegasus, José Luis Calama, ha emitido una interlocutoria donde considera que el caso no solo tiene que ver con la intimidad de Pedro Sánchez, Margarita Robles i Fernando Grande-Marlaska, sino que afecta "el interés general".
¿Qué es el programa Pegasus?
¿Qué es el CatalanGate?
El CatalanGate es como se denomina el caso de espionaje a al menos 65 personas relacionadas con el movimiento independentista. La investigación de la mano de la organización Citizen Lab, y publicada por la revista estadounidense The New Yorker, reveló los nombres de los espiados con el programa israelí Pegasus. En la mayoría de casos se había utilizado este programa, que una empresa israelí vende a los gobiernos interesados en perseguir delincuentes, o controlar a la disidencia. Esta lista inicial de 65 personas, que de momento, se han convertido en 67, los teléfonos de 63 de ellos estuvieron infectados con Pegasus, y otros cuatro con Candiru, un programa similar. En el listado hay muchos nombres ilustres, empezando por el president Pere Aragonès y sus tres predecesores en el cargo: Quim Torra, Carles Puigdemont y Artur Mas. Aunque, según se sabe hasta ahora, el software no pudo acceder al dispositivo del president Puigdemont, pero si en el de su entorno, como su mujer o su abogado, Gonzalo Boye. Los ataques para infectar a las víctimas de Pegasus se hicieron a través de al menos dos técnicas: exploits de clic cero y mensajes SMS maliciosos. Los ataques por SMS consistían en el envío de mensajes de texto convincentes que contenían enlaces maliciosos para engañar a los destinatarios y hacer que clicaran.
Miembros del Parlamento Europeo, presidentes catalanes, legisladores, juristas, miembros de organizaciones civiles y algunos de sus familiares fueron objetivo del programa espía. Casi todos los ataques se produjeron entre 2017 y 2020, momento en el cual se vivieron los momentos más álgidos del procés, con el referéndum del 1-O. Aunque el Citizen Lab encontró un caso de ataque en 2015. Por el hecho de que España tiene más usuarios de Android que d'iOS, y las herramientas forenses del Citizen Lab están mucho más desarrolladas para este último sistema operativo, la organización cree que su informe subestima en gran manera el número de individuos que probablemente fueron blanco de Pegasus. Por otra parte, las incursiones que se hicieron en el teléfono de Jordi Sànchez, exlíder de la ANC y actual dirigente de Junts, la mayoría de infecciones tuvieron lugar en los años 2019 y 2020.
Desde que estalló el caso CatalanGate, el Gobierno, ha negado su implicación, asegurando que "siempre actúa conformemente a derecho y en estricto cumplimiento de la legalidad". Aunque tres semanas más tarde, ha acabado confirmando que si utilizaron Pegasus con 18 personas para investigar Tsunami Democràtic.
Pegasus y el Gobierno
La confirmación en el marco de la comisión de secretos oficiales del Congreso que los servicios de inteligencia españoles han espiado el presidente con autorización judicial, ha complicado todavía más las ya bastante resquebrajadas relaciones entre el gobierno catalán y el español. Visiblemente incómodo con el asunto, el Gobierno ha dado pocas explicaciones de primera mano sobre el espionaje. Los dos grandes señalados del espionaje con Pegasus son el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y la ministra de Defensa, Margarita Robles, que también habrían sido espiados con Pegasus. Precisamente, a la comisión de Defensa de este miércoles, la ministra Robles no aclaró ningún extremo sobre el caso, amparándose en la ley de secretos oficiales. La sospecha del CNI es que no son los únicos investigados. Una sospecha que se ha confirmado con el informe presentado por gobierno español que confirma que se infectaron con Pegasus los terminales de Pedro Sánchez, Margarita Robles i Fernando Grande-Marlaska. Se intentó infectar, sin éxito, el del ministro de Agricultura, Luis Planas.
El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, comparecerá al pleno del Congreso el 25 o 26 de mayo, según fuentes del PSOE, para dar explicaciones sobre el CatalanGate y la infección con Pegasus de su dispositivo y los de los ministros de Defensa e Interior. La Moncloa busca también fecha por la reunión del presidente español con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, una vez Sánchez se comprometió con él a mantener un encuentro oficial para abordar el espionaje.
Espiados en Catalunya
Hasta el momento, y según destapó el portal de investigación Citizen Lab, entre todos los nombres del llamado CatalanGate destacan otros tres presidentes de la Generalitat (Pere Aragonès, Quim Torra y Artur Mas), así como toda una serie de políticos, diputados, activistas, periodistas, informáticos, empresarios... La lista de los 67 nombres confirmados que han sido espiados por Pegasus, donde hay que añadir a cuatro personas anónimas.
La lista de los investigados con Pegasus contiene los siguientes nombres: Alba Bosch, Albano Dante Fachin, Albert Batet, Albert Botran, Andreu Van den Eynde, Anna Gabriel, Antoni Comin, Arià Bayé, Arnaldo Otegi, Artur Mas, Carles Riera, David Bonvehí, David Fernàndez, David Madí, Diana Riba, Dolors Mas, Elías Campo, Elena Jiménez, Elies Campo, Elisenda Paluzie, Elsa Artadi, Ernest Maragall, Ferran Bel, Gonzalo Boye, Jaume Alonso Cuevillas, Joan Matamala, Joan Ramon Casals, Joaquim Jubert, Joaquim Torra, Jon Iñarritu, Jordi Baylina, Jordi Bosch, Jordi Domingo, Jordi Sànchez, Jordi Solé, Josep Costa, Josep Lluís Alay, Josep M. Ganyet, Josep Maria Jové, Josep Rius, Laura Borràs, Marc Solsona, Marcel Mauri, Marcela Topor, Maria Cinta Cid, Marta Pascal, Marta Rovira, Meritxell Bonet, Meritxell Budó, Meritxell Serret, Míriam Nogueras, Oriol Sagrera, Pau Escrich, Pere Aragonès, Pol Cruz, Roger Torrent, Sergi Sabrià, Sònia Urpí, Xavier Vendrell y Xavier Vives.
Tres semanas después de que Citizen Lab publicara estos 67 nombres, y después de muchas negativas, el Centro Nacional de Inteligencia ha acabado confirmando que si espiaron a 18 personas con Pegasus para investigar Tsunami Democràtic. La directora del CNI, Paz Esteban, confirmó lo espiontage a la comisión de secretos oficiales. Eso sí, Paz Esteban ha rebajado la lista a solo 29 dirigentes independentistas, entre los cuales hay el presidente Pere Aragonès y el entorno del expresidente Carles Puigdemont en Waterloo. Así como la orden de espionaje que dio al ejecutivo español había el del seguimiento al ingeniero que ha liderado la investigación sobre el espionaje, Elies Campo Cid, que, según el Gobierno, también habría formado parte del diseño la estructura tecnológica de Tsunami y por eso lo quería controlar. El resultado de esta investigación, que según las fuentes que han filtrado la información tenía la autorización del Tribunal Supremo, se transmitieron en la Moncloa. El ingeniero Campo Cid, que participó en la investigación de Citizen Lab, asegura que la mayoría de intervenciones telefónicas se hicieron entre el 2019 y 2020, momento álgido de Tsunami Democràtic que organizó protestas contra la sentencia como la multitudinaria marcha hasta el aeropuerto del Prat.
Espiados en el Gobierno
El lunes, 2 de mayo, se produjo un giro de guion. La Moncloa organiza una comparecencia extraordinaria para explicar que en mayo de 2021 los teléfonos móviles de Pedro Sánchez y Margarita Robles también fueron espiados con Pegasus. El ministro de la presidencia, Félix Bolaños, encargado de transmitir este mensaje, calificó estas actuaciones de "espionajes fuera de la ley" anunciando así la puesta en conocimiento estos "hechos inequívocos" en la Audiencia Nacional.
Las investigaciones hechas por técnicos del Centro Criptológico Nacional, detectan dos intrusiones en el teléfono oficial de Sánchez en mayo del 2021, en estas le robaron más de 2,7 gigas de información del móvil. Sobre todo eso, se tiene que tener un pequeño detalle, pero muy relevante, en cuenta: el teléfono oficial del presidente español no es un dispositivo convencional. Este teléfono fue fabricado por el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) español, es un teléfono de alta seguridad, al cual no se puede poner ni sacar ninguna aplicación. El teléfono de Pedro Sánchez está fabricado por los servicios de inteligencia y no se puede espiar externamente porque está fabricado expresamente para que no se pueda manipular con facilidad, y así se evita cualquier infección informática. Un móvil aislado y aséptico de injerencias externas, pero que aparenta normalidad con una carcasa que imita un smartphone convencional. También fue infectado el teléfono del ministro del Interior y se intentó hacer el mismo con el ministro Luis Planas, exembajador del Marruecos.
Una sospecha que se ha confirmado con el informe presentado por gobierno español que confirma que se infectaron con pegasus los terminales de Pedro Sánchez, Margarita Robles i Fernando Grande-Marlaska. Se intentó infectar, sin éxito, el del ministro de Agricultura, Luis Planas.
¿Cuál es el papel del CNI?
El Centro Nacional de Inteligencia puede investigar a cualquier español, siempre que la necesidad del espionaje esté justificada en una serie de motivos, principalmente la "seguridad nacional". Pero también se puede justificar en "la seguridad pública, el bienestar económico del país, la defensa de la orden y la prevención del delito, la protección de la salud o de la moral, o la protección de los derechos y las libertades de los otros". De esta manera lo establece el artículo 8 del Convenio Europeo para la Protección de los Derechos Humanos y de las Libertades Fundamentales, tal como señala la exposición de motivos de la Ley orgánica 2/2002, de 6 de mayo, reguladora del control judicial previo del Centro Nacional de Inteligencia. El CNI siempre tiene que pedir una autorización judicial para investigar a cualquiera. El derecho a la intimidad personal y familiar está recogido en el artículo 18 de la Constitución y es uno de los derechos fundamentales. Es por eso que la Carta Magna exige autorización judicial para poder vulnerarlo.
Actualmente, este espionaje sólo lo puede autorizar una persona, Pablo Lucas, que es el magistrado del Tribunal Supremo competente del control del CNI desde el 20 de diciembre de 2019. Ya antes había ejercido este papel, ya que la primera vez que lo ejerció fue en noviembre de 2009. Una vez autorizado el espionat, si la actuación autorizada es la "afección a la inviolabilidad del domicilio", el plazo "no podrá exceder de 24 horas". En caso de que se intervengan las comunicaciones postales, telegráficas, telefónicas o de cualquier otro tipo, dispondrá de tres meses.
Más de dos semanas después de que estallara el escándalo CatalanGate de espionaje masivo al independentismo, rueda el primer jefe. Es el de Paz Esteban, directora del Centro Nacional de Inteligencia y principal señalada por el caso Pegasus, que ha sido cesada de su cargo. Pero no ha caído por el espionaje al independentismo, sino por la infección de tres móviles del gobierno español y un intento fallido. Esta misma mañana se ha formalizado su destitución en Consejo de Ministros y se le ha comunicado, una vez ha finalizado el análisis de todos los dispositivos móviles de los ministros. Esperanza Casteleiro Llamazares es la nueva directora del Centro Nacional de Inteligencia español, el CNI. Robles ha querido confiar en una persona de su máxima confianza con quien lleva años trabajando estrechamente. Tras el cese de la directora del CNI, el presidente del Govern, Pere Aragonés, ha avisado el gobierno español que no puede dar la crisis del espionaje "ni por matizada ni por resuelta". Por su parte, el Parlament ha aprobado "congelar todas las relaciones institucionales" con el ejecutivo español y que el Govern mantenga esta estrategia ante el escándalo del CatalanGate.
Pegasus en el Parlamento Europeo
Menos de 24 horas después de que el escándalo del CatalanGate saliera a la luz, el Parlamento Europeo consituia la comisión que investiga Pegasus y otro software de espionaje. Entre los miembros de la comisión hay eurodiputados que han sido víctimas del software, como la representante de ERC Diana Riba, quien será propuesta por el grupo de los Verdes/ALE para que ocupe una de las vicepresidencias. En la comisión también participa al presidente al exilio y eurodiputado de Junts, Carles Puigdemont. Aunque Puigdemont no pare en el listado de Citizen Lab, sí que hay mucha gente de su entorno.
El debate sobre el Pegasus en el Parlamento Europeo, los eurodiputados independentistas, buena parte de los cuales han sido directamente atacados por Pegasus, han denunciado el espionaje y han reclamado explicaciones. En términos similares se han expresado Bildu, PNV, Podemos e IU. De hecho, la denuncia contra el espionaje se ha convertido en el hilo conductor de las numerosas intervenciones que se han registrado. Con todo, la Comisión Europea ha dejado claro que está en los estados a quienes corresponde investigar estos hechos.
El 4 de mayo, el Parlamento Europeo acogió un debate sobre el uso de software espías como Pegasus, encontrados a las víctimas del CatalanGate donde las formaciones políticas españolas se encontraron contra las cuerdas. Sin embargo, algunas han insistido en cuestionar el espionaje a independentistas y la veracidad de la investigación de Ctizen Lab. Es el caso de los representantes de Ciudadanos en el Parlamento Europeo. Con Jordi Cañas al frente, los eurodiputados enviaron una serie de preguntas al grupo de investigadores de la Universidad de Toronto poniendo en duda la fiabilidad de su trabajo. Citizen Lab no solo ha respondido las preguntas de Ciudadanos desmontando sus cuestionamientos, sino que su director, Ronald Deibert, ha compartido las respuestas a través de las redes sociales. Uno de los aspectos que más se cuestionan a lo largo del documento, es el papel de Elies Campo en la investigación. Deibert ha defendido anteriormente la tarea de Campo y en la respuesta a Cs, Citzen Lab defiende su trabajo.