El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès (ERC), ha declarado este miércoles ante el titular del juzgado de instrucción 29 de Barcelona que fue espiado por el Gobierno, a través del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), con la infección de su móvil con el software Pegasus entre julio de 2018 en marzo de 2020, según una pericial aportada, aunque inicialmente la querella fijaba los días 4, 5 y 13 de enero de 2020, cuando los alertó el grupo de investigación Citizen Lab el 2021, que descubrió 65 afectados del independentismo catalán. La querella también se dirige contra la empresa NSO, propietaria de Pegasus.
"He venido a ratificar la querella contra el CNI porque me espió. Queremos que se sepa toda la verdad y que nunca más ningún ciudadano de Cataluña ni ningún político sea espiado por su ideología", ha declarado Aragonés a los periodistas, después de más de una hora de declaración. Preguntado si el gobierno de Pedro Sánchez desclasificará la investigación del CNI sobre su seguimiento, el presidente republicano ha afirmado: "Es una obligación ética y moral del gobierno español levantar el secreto de este espionaje político tan grave." El magistrado de Barcelona ya ha elevado el suplicatorio al Consejo de Ministros para que desclasifique la información de Aragonés que tiene el CNI y espera su respuesta desde mediados de noviembre.
Investidura de Pedro Sánchez
El juez Santiago García ha preguntado al presidente Aragonés qué temas y qué información tenía en su móvil infectado, que es mismo que usa en el ámbito personal y laboral. Aragonés ha explicado que en las fechas de 2018 a 2020, él era vicepresidente y conseller de Economía, y que hay cuatro acontecimientos políticos clave: el inicio de la mesa de diálogo, la moción de censura de Rajoy, la negociación de los presupuestos y la formación del segundo gobierno de Pedro Sánchez, además de habla con banqueros, empresarios y en el ámbito personal.
El fiscal de Delitos Informáticos, Roberto Valverde, también le ha preguntado a Aragonès si había notado que alguna de la información que tenía en el móvil ha sido usada o difundida. El president ha declarado a los periodistas que no supo que era espiado hasta el descubrimiento del laboratorio canadiense con la falta de seguridad que tenía la aplicación WhatsApp, empresa a quien alertó.
Oposición de la Abogacía del Estado
Quien no ha comparecido en la declaración del presidente Aragonés es la abogada del Estado que defiende la exdirectora del CNI Paz Esteban, imputada en este procedimiento por el delito de revelación de secretos. La abogada ya pidió el aplazamiento de la declaración de Esteban prevista por este miércoles también porque tenía otro señalamiento, pero no ha enviado ninguno abogado sustituto. La nueva citación del juzgado a Esteban es a finales de enero.
Además, la abogada del Estado, Beatriz Vizcaíno, ha presentado al juez un recurso contra todas sus diligencias de investigación, incluido el levantamiento del secreto de los seguimientos del CNI a Aragonés, en parte ya reconocido en una comisión de secretos del Congreso de Diputados, con 17 personas afectadas más. En el recurso, la abogada del Estado ha calificado estas diligencias “de impertinente, innecesarias y prospectivas” y ha pedido al juez que las anule porque, a parecer suyo, no se imputa nada concreto a Esteban.
Réplica de ERC
El abogado del presidente Aragonés, el penalista Andreu Van den Eynde, ha respondido con claridad y dureza el recurso de la Abogacía del Estado y ha pedido al juez que no rectifique ninguna de las diligencias que ha acordado. “La recurrente lo que pretende es convencer al instructor para que no investigue los hechos objeto del procedimiento de ninguna forma que pueda conducir al descubrimiento y determinación de responsabilidades legales”, afirma en el escrito al cual ha tenido acceso ElNacional.cat.
Y sobre la afirmación que no se imputa nada concreto a la entonces directora del CNI, Van den Eynde le replica: “Se le imputa haber decidido o contribuido a la interceptación de las comunicaciones y el acceso a información personal protegida del M. H. Pere Aragonès intermediando el uso de técnicas de spyware o análogas (probablemente con uso del malware Pegasus) sin respetar la legalidad vigente o los límites legales que lo permitan o justifiquen, en fechas por ahora desconocidas, pero en todo caso entre julio de 2018 y marzo de 2020, sin perjuicio de que la instrucción pueda revelar otros hechos íntimamente vinculados a estos.”
Espionaje aprobado
El abogado, en su recurso, detalla que, según las informaciones que se dispone, el espionaje de Aragonés lo autorizó el magistrado de control previo del CNI. Van den Eynde manifiesta: “Si esto es así, resulta obvio que no se autorizó una infección y bastante, sino que se tendría que autorizar una infección para intervenir información durante un tiempo”, e insiste que “estos detalles solo los puede recavar la investigación y no es deber de la víctima proporcionar una información que naturalmente no tiene capacidad de obtener sin ayuda del sistema de justicia penal.
Precisamente, el magistrado de control del CNI, Pablo Lucas, ya ha respondido al juez de Barcelona que no lo puede informar de nada sobro Aragonés porque la causa continúa secreta.