Este lunes se ha celebrado la primera sesión de comparecencias en el marco de la comisión de la Operación Catalunya, donde han intervenido los periodistas del diario Público, Patricia López y Carlos Enrique Bayo. Los redactores han asegurado que el Gobierno español disponía de una "brigada policial", una especie de "policía paralela" a disposición del Ministerio del Interior y que actúa desde hace años recogiendo información contra adversarios políticos. Sin embargo, no fue hasta la primavera del 2012 cuando se empezaron a filtrar dossieres e informes que tuvieron una gran repercusión para el Govern.
Según han asegurado, uno de los puntos claves en esta operación fue la comida de la Camarga entre la entonces presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho y la expareja de Jordi Pujol Ferrusola, Victoria Álvarez. "Salieron de allí con acusaciones de corrupción contra Pujol pero no se denunció nada. Se guardó la grabación en un cajón hasta que se pudo utilizar políticamente", ha asegurado Patricia López.
De hecho, esta información no salió a la luz hasta dos años más tarde, coincidiendo con el auge del independentismo. "La voluntad de poner en marcha esta operación deriva de la última reunión del expresidente Artur Mas en Moncloa, donde exige una serie de condiciones al Ejecutivo central", relata el periodista. En aquel momento, según asegura Enrique Bayo, el Gobierno de Mariano Rajoy ya disponía de mucha información, derivada de años de investigación sobre la familia del expresidente Pujol y otras autoridades y partidos catalanes.
Los periodistas también han hecho referencia a otra grabación, la que protagonizaron el exministro Jorge Fernández Díaz y el exjefe de la Oficina Antifraude Daniel de Alfonso, y han asegurado que el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, tenía constancia.
"Una trama mucho más compleja"
Con todo, los periodistas han confirmado la existencia de la Operación Catalunya pero la han situado en un entramado mucho más complejo y que no funciona exclusivamente contra el independentismo catalán. De hecho, la "brigada política" que han denunciado existe, según mantienen, mucho antes que Jorge Fernández Díaz y deriva de la brigada politicosocial de la dictadura franquista.
En este marco de una operación con más actores, los periodistas han soltado algunas acusaciones a otros partidos. "La brigada política ha funcionado independientemente del color del Gobierno español", han asegurado.
A la Comisión no ha asistido ningún representante del PSC ya que, como anunciaron después de que la Comisión Santi Vidal quedara en vía muerta, no participarían. "Nosotros queremos saber de todo y no sólo de aquello que le interesa al Gobierno", aseguró en aquel momento a la diputada Alicia Romero.