La instalación, el pasado enero, de una máquina expendedora provisional en la estación de Renfe de Ayerbe (Huesca) ha movilizado a la plataforma catalanofóbica No Hablamos Catalán, que se ha hecho eco de supuestas quejas de usuarios ante la circunstancia que la máquina de venta de billetes -que sustituye a la venta por taquilla- ha llegado con rótulos en castellano y catalán.
Ayerbe está situada al oeste de la provincia de Huesca y alejada, por tanto, de la zona catalanófona de la Franja. Aún así, llama la atención que la instalación de esta máquina -provisional según la misma Renfe- haya disparado las alarmas de entidades contrarias al uso del catalán, que no han evitado el uso de expresiones como “imposición del catalán” o “rodillo catalanista”.
Según ‘Heraldo de Aragón’, todo indica que se trata de una máquina reutilizada procedente de una estación catalana, y se indica que la interficie de usuario e incluso un cartel pegado a posteriori donde se informa que solo se puede pagar con tarjeta están escrito igualmente en castellano y catalán. Renfe ha indicado que técnicos de la empresa trabajan para eliminar el catalán de la máquina.
Por su parte, y según el medio citado, el alcalde de la localidad, Antonio Biescas (PSOE), asegura que no ha recibido ninguna queja al respecto y que, en todo caso, el problema es el cierre de la taquilla que obliga a todos los viajeros a hacer uso de la máquina, más allá de que además de en castellano también se ofrezca en catalán.