Pilar Rahola se ha vuelto "almogávar" para plantar cara al "fascismo de derechas y de izquierdas", al día siguiente del ataque que sufrió en una conferencia en La Garriga (Vallès Oriental). La periodista, escritora y colaboradora de ElNacional.cat ha presentado este miércoles en la Casa del Libro de Rambla Catalunya su último libro, Cornèlius, el almogávar (premio Prudenci Bertrana), y ha aprovechado para enviar un mensaje a los manifestantes que este martes la rociaron con pintura roja: "No soy un almogávar, pero si tengo mamelucos en frente que quieren hacer alguna maldad, me vuelvo almogávar". "A mí no me callarán, ni el fascismo de derechas ni el de izquierdas", ha advertido. Y no lo ha hecho sola: Josep Lluís Alay, Artur Mas, Jaume Giró, Xavier Trias y Victòria Alsina la han acompañado en la presentación, así como Laura Borràs, Albert Batet y Francesc de Dalmases. El acto ha contado con la participación del mismo Alay y de Antoni Gelonch.
Ante la importante presencia política y los hechos de este martes en La Garriga, la librería ha estado blindada por agentes de los Mossos d'Esquadra. Un ambiente que ha tenido en cuenta la presentadora, que ha lamentado "estar atrincherados" para la presentación del libro. Las 120 personas presentes han aplaudido para dar apoyo a Rahola, que más adelante ha recordado que el president Jordi Pujol había asegurado que ella era "el último almogávar". "Pero los aspectos más violentos no me gustan, soy una guerrera de la palabra", ha dicho, justo antes de enviar un mensaje a los manifestantes: "Si los chicos de la pintura me hubieran dicho que querían debatir, los habría hecho subir al escenario".
Respecto al libro, Gelonch ha destacado que, "contrariamente a la flagelación, trata de nuestros siglos de oro". "¿Por qué los catalanes no hemos hecho un buen libro de nuestros siglos de oro, del XII al XIV? Necesitamos un libro de ensayo que llegue a todo el mundo, que explique cuándo hemos ganado. Pero son como somos", ha expresado. Al respecto, Rahola ha explicado que sus novelas "quieren poner la mirada en un momento del país". También ha relatado cómo "la Corona Catalana, cuando conquistaba, era para abrir comercio" —a diferencia de los castellanos, que hacían vasallos.
Gelonch ha añadido que el libro y su protagonista, Cornèlius Papapoulos, hacen una "defensa de los almogávares". "Denostados en una calle de Barcelona", ha bromeado. Así, sí que ha reconocido que la novela explica la historia de las calles de la capital catalana, como la calle Almogávers, Roger de Flor, Roger de Llúria... En esta línea, la escritora ha remarcado que los almogávares se caracterizaban por la "resiliencia". "Alguna cosa de esta resiliencia todavía nos queda. Porque quedamos y todavía estamos", ha considerado. ¿Ahora bien, habrá película? "Si fuera en inglés, harían una serie", ha ironizado.
Por su parte, Alay ha asegurado que el libro "hace un retrato del Mediterráneo" y que "Cornèlius te lleva al mundo mítico de Roger de Flor". Es de esta manera que ha hecho notar que la novela habla de imperios y reinos que todavía están, como los mamelucos (Turquía), los griegos y los alanos (Osetia). Además, ha puesto el foco en el vínculo que Cornèlius, el almogávar tiene con Tirant lo Blanc, justamente este miércoles 9 de octubre: la Diada del País Valencià. Y es que uno de los puntos fuertes —como ha coincidido Gelonch— es que está "lleno de datos contrastados". "Los datos están tres veces contrastados", ha indicado la escritora.
Rahola ha recordado que la novela surgió de un sueño: un día se despertó con el nombre de Cornèlius Papapoulos en la boca y pensó que haría una historia alrededor de este nombre. Y así fue: lo hizo coetáneo de Ramon Llull, de quien la autora está "enamorada". Finalmente, ha agradecido la presencia de las más de cien personas presentes en el acto y ha reconocido que "si el libro sirve para recuperar la historia robada, alguna cosa habremos conseguido".