Los usuarios de las redes sociales han pillado a españolistas haciendo pasar heridos del 1-O como personas heridas en Ferraz, en el contexto de las cargas policiales contra los ultras que querían acceder a la sede del PSOE. En Twitter, una persona ha difundido una imagen de una señora mayor con sangre en la cabeza y con la afirmación que "Marlaska ya ha ordenado a la policía cargar en la calle Ferraz". "Han abierto la cabeza a mi abuela, socialista desde hace 50 años, que nos ha acompañado esta noche diciendo que Sánchez está vendiendo España a los independentistas", ha añadido. Y una amenaza: "Pagarás por esto, Perro Sánchez".
🔴 Manifestación en Ferraz contra la amnistía, DIRECTO | Última hora de las protestas en Madrid
Todo mentira. Ni la persona en la imagen ha sido herida por la policía española en las protestas de Ferraz, ni se trata de su abuela socialista desde hace 50 años. En las notas de la comunidad, los usuarios de Twitter han explicado que la imagen corresponde a la entrada de la policía española en el colegio Freire de Roquetes (Barcelona), durante la celebración del referéndum del 1 de octubre del 2017 en Catalunya. "Van desesperados", ha respondido una persona, a modo de crítica a los españolistas que quieren victimizarse y demonizar al Gobierno en funciones.
De los disturbios de la quinta noche al pinchazo de la sexta
Esta noticia falsa ha llegado después de los disturbios en Madrid de este martes, que acabaron con seis detenidos y cargas policiales. La protesta delante la sede del PSOE reunió a unas 7.000 personas y rápidamente escaló en violencia, enfrentando a los ultras de extrema derecha y a los antidisturbios. No se vieron imágenes como la del 1 de octubre, pero sí que se contabilizaron algunos heridos: 39, concretamente —29 de los cuales son policías—. "¡Sánchez a prisión!", "¡Que te vote Txapote!", "¡Viva Franco!" e insultos contra Carles Puigdemont fueron algunas de las consignas más repetidas de la quinta noche de disturbios en Ferraz.
Este miércoles ha tenido lugar la sexta noche consecutiva de manifestaciones en la sede del PSOE, sin que haya habido incidentes violentos. La cifra de asistentes ha bajado considerablemente y la protesta ha pinchado, con una mayoría moderada que ha intentado contener la minoría ultra presente en la concentración. Sin embargo, los gritos y los insultos contra Puigdemont y Sánchez se han mantenido.