La denominada Plataforma 3-O ha convocado una rodeada del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) el próximo sábado 3 de octubre para conmemorar el tercer aniversario del paro de país, que se produjo dos días después de celebrar el referéndum del 1-O para denunciar la violencia policial que sufrieron las personas que fueron a votar o a proteger las urnas. La acción programada para el próximo 3 de octubre se enmarca en la campaña Seguim la lluita, que este sábado ha celebrado su primer acto delante la antigua sede de Economía, en la Rambla de Catalunya con Gran Via.
Alrededor de un centenar de personas con esteladas se han unido a la convocatoria para recordar los hechos del 20 de septiembre del 2017, cuando la Guardia Civil entró en diferentes departamentos de la Generalitat con el fin de evitar la celebración del referéndum y eso comportó manifestaciones multitudinarias en la calle como la que se produjo delante la antigua sede de Economía. De hecho, es por estos acontecimientos que los Jordis cumplen pena de prisión condenados por un delito de sedición.
"No somos violentos, somos radicales"
El periodsita Antonio Baños ha manifiestado que desde aquel 20 de septiembre el estado español ha querido vincular el independentismo con un movimiento "terrorista", que "pone bombas" y es violento. A su parecer, sin embargo, esta estrategia no le ha salido bien. "No somos violentos, somos radicales", ha asegurado Baños, exdiputado de la CUP y miembro del Secretariado Nacional del Assemblea Nacional Catalana (ANC). En esta misma línea, también ha afirmado que persiguen "radicalmente la libertad" del pueblo de Catalunya "sin condiciones", ya que quieren ser libres para "ser mejores".
Otro de los elementos que también se empezó a percibir este 20 de septiembre, según Baños, es la represión del Estado. "Empezamos a intuirlo y ahora ya lo sabemos a ciencia cierta: es una represión incansable, inclemente, inmisericorde, que rompe sus propias leyes, que es cruel y no se detendrá nunca con nadie", ha conclós.
En este acto también ha intervenido el activista y payaso Jordi Pesarrodona, que fue concejal por ERC en Sant Joan de Vilatorrada y durante el referéndum estuvo en la escuela Juncadella del municipio, donde la Guardia Civil acudió para evitar que se realizara la votación. "Votamos y resistimos el embate de esta Guardia Civil agresora en Sant Joan de Vilatorrada. Ahora ya sabemos que vinieron directamente a represaliar a un payaso que no le perdonaron que el 20 de septiembre estuviera plantado en el Departamento de Gobernación", ha señalado.
Pesarrodona, que se enfrenta a un juicio de desobediencia grave por hacerse una fotografía con una nariz de payaso al lado de un Guardia Civil el 20 de septiembre del 2017, también participó en el juicio del procés del 1-O donde explicó ante el Tribunal Supremo que los agentes que intervinieron en su municipio le propinaron cuatro porrazos en los testículos. "Los miraremos cara a cara y evidentemente reconoceremos que estábamos allí para votar, al lado de los ciudadanos y que nosotros sólo hicimos resistencia pacífica y que son ellos los que nos agredieron y no nosotros que los agredimos a ellos. Por lo tanto, somos un pueblo pacífico, ganaremos, resistiremos", ha argumentado.
Por su parte, Meritxell Lorente, de la Asamblea en Defensa de las Instituciones Catalanas (ADIC), ha querido enfatizar la represión del Estado español poniendo varias acciones suyas como ejemplos: "Persecución de cargos electos a las instituciones europeas, control del gasto público, periodistas, actores, activistas, payasos perseguidos y encarcelados, presiones en las relaciones internacionales, leyes y resoluciones del Parlament suspendidas, censura en los edificios públicos."