El presidente de Plataforma per la Llengua, Òscar Escuder, ha comparecido este jueves ante el Intergrupo de Minorías Tradicionales, Comunidades Nacionales y Lenguas del Parlamento Europeo, para pedir a los eurodiputados que ayude a "hacer saber que España tiene, durante el siglo XXI, presos políticos."

Escuder ha hecho referencia a los presidentes de Òmnium Cultural y ANC, Jordi Cuixart y Jordi Sánchez, para criticar que "en Catalunya estamos viviendo una situación insólita donde nos golpean para poner urnas y ponen líderes políticos en la prisión". El presidente de Plataforma per la Llengua ha destacado que los encarcelados han sido los responsables de las mayores movilizaciones pacíficas de los últimos años y que el catalán, una lengua que lo utilizan unos 10 millones de personas y se habla en tres estados de la UE, "no es una lengua minoritaria, sino que sea una lengua minimizada".

Escuder ha acabado diciendo que el catalán sufre una "discriminación estructural" por parte del Estado, por hechos como los que no exista la obligación de conocer esta lengua por parte de algunos trabajadores públicos, y que sólo el 8% de las sentencias judiciales son redactadas en catalán.