Con 20 minutos de margen Podemos ha desconvocado esta mañana la reunión que tenía pensado llevar a cabo a las 10h, junto con Compromís, Izquierda Unida (IU) y las confluencias. La idea, según explicaba ayer el portavoz de los morados en el Congreso, Íñigo Errejón, era articular una alternativa a la gran coalición. Ahora bien, con una particularidad respecto a otras veces: no era necesario que el PSOE asistiese, en tanto que veían posible seguir trabajando para avanzar un acuerdo y ofrecerlo a los socialistas, en caso de que estos se encontraran en la disyuntiva de escoger entre ellos o el Partido Popular (PP).
Esta, según Errejón, es la voluntad de Ciudadanos y "ya lo veníamos advirtiendo". Los morados ven en la estrategia de Albert Rivera la idea de sumar a los populares y el "peligro de la gran coalición". Sin embargo, IU no lo veía claro. Para los de Alberto Garzón, la mesa 'a cuatro' se llama así en tanto que asisten todos los de la izquierda. El líder de IU está en desacuerdo con seguir avanzando en una propuesta que no pase por la presencia del PSOE, a pesar de que asegura que "161 escaños suman más que 130". Precisamente, Garzón afirma sentirse "instrumentalizado" por las otras formaciones, "que ya están en campaña". De esta manera, prefiere esperar y durante el día de hoy volverá a llamar a los de Ferraz, Podemos, a las confluencias y Compromís para reanudar los diálogos –eso sí, sin Ciudadanos–.
Por tanto, los de Pablo Iglesias se habían encontrado solos a las 9:40h de la mañana con Compromís, viéndose empujados a desconvocar la mesa de diálogo y a desarticular –por ahora– la elaboración del documento que pueda ser alternativa a la gran coalición. Parece que Podemos tiene los caminos de avance obstruidos por el momento, divergiendo con los de la izquierda, y rechazando sentarse con C's y PSOE en su ronda de diálogo, como hoy les han hecho saber respondiendo a su carta.