La Asociación Católica de Propagandistas (ACdP) ha empezado una campaña en 40 ciudades del Estado español contra la ley de memoria histórica recientemente aprobada. La entidad ha utilizado a los muertos católicos durante la Guerra Civil para afirmar que la nueva ley quiere imponer una visión única del conflicto bélico y posterior dictadura. "España es el país donde más personas han muerto perdonando a sus verdugos", reza el eslogan de la campaña de los ultracatólicos, que pretende denunciar la supuesta erradicación de la historia española de los religiosos muertos en la respuesta de la República al golpe de Estado de Francisco Franco.
"En España, entre 1931 y en 1939, tuvo lugar la persecución más cruel que se recuerda contra la Iglesia y los católicos", ha explicado Jaume Vives, antiguo defensor de Tabarnia y responsable de esta campaña de ACdP, según recoge elDiario.es. Vivas sostiene que la nueva legislación "busca instalar un relato único sobre el pasado y difuminar la realidad de la persecución religiosa que tuvo lugar en España". La entidad sostiene que el actual Gobierno quiere "hacer desaparecer a Cristo de la cultura, de la vida y la muerte de las personas."
La campaña ya está presente en una cuarentena de municipios como Málaga, Madrid o Girona. En un comunicado, sobre la misma, el ACdP presume de una posible censura de la propaganda, afirmando que han encontrado dificultades para hacerla llegar a las calles. La entidad vincular de forma incoherente las muertes de religiosos a la Guerra Civil con una supuesta persecución de cristianos en la actualidad. La campaña, a grandes rasgos, es una amalgama de datos de dudosa procedencia bajo el paraguas de una frase chillona estampada en las marquesinas de varias ciudades de todo el Estado.
¿Qué es el ACdP?
Los propagandistas, como el nombre de su propia asociación indica, son un grupo ultracatólico fundado por Ángel Herrera Oria, que hizo de esta una de las fuerzas vivas de la derecha frentista de los años 30. Actualmente, la entidad se mueve entre los círculos de la extrema derecha organizando encuentros con líder ultras como Santiago Abascal o promoviendo congresos con organizaciones como Hazte Oir.
La entidad ya ha promovido otras campañas que más allá de su impacto mediático no han conseguido nada. Eso sí, a pesar de no desembocar en nada, los propagandistas apuestan por eslóganes chillones, como hacen otras entidades de extrema derecha que empujan su mensaje a través del impacto. Por ejemplo, los propagandistas estaban últimos de una campaña que afirmaba: "Rezar ante una clínica abortista está genial". A pesar del impacto comunicativo, la nueva ley del aborto siguió su curso sin más.