La cúpula policial del ministro del Interior Jorge Fernández Díaz compró clandestinamente y sin autorización equipos para interceptar y grabar teléfonos móviles y otros dispositivos. Esa tecnología sirvió presuntamente para registrar de forma ilegal las conversaciones entre el exministro y el exjefe de la Oficina Anticorrupción de Cataluña, Daniel de Alfonso, y una reunión entre policías y miembros del CNI, según informa El País este martes.
Quien entonces era jefe de Asuntos Internos de la policía española, Marcelino Martín Blas (foto), presentó el viernes pasado documentación sobre esa compra ante el Juzgado de Instrucción Número 2 de Madrid. Esos documentos acreditan que los autores de la compra fueron el Director Adjunto Operativo de la policía, Eugenio Pino, y su jefe de gabinete, José Ángel Fuentes Gago. La tecnología fue adquirida a la compañía israelí Rayzone Group en verano de 2014.
No existe registro oficial o concurso alguno que justifique la compra de esos equipos de escucha y grabación, según la documentación presentada en el juzgado, que incluye todas las compras y concursos para tecnología del Ministerio del Interior en 2014, según explica el diario.
Las conversaciones del 2 y 16 de octubre de 2014 entre Fernández Díaz y De Alfonso descubrieron que ambos habían conspirado para actuar contra políticos soberanistas catalanes, en connivencia con la propia fiscalía anticorrupción, en lo que se dio en llamar “operación Catalunya”. La justicia desestimó las querellas que se presentaron como también otras investigaciones de la fiscalía sobre el caso.