El delegado del Frente Polisario en España, Abdulá Arabi, ha reprochado a Sumar y al PSOE la "oportunidad histórica" que han perdido al no haber incluido en el acuerdo de Gobierno de coalición presentado esta semana la vuelta a la postura tradicional con respecto al Sáhara, una postura de neutralidad y amistad pasiva con el pueblo saharaui que en el 2022 el gobierno de Pedro Sánchez enterró al dar apoyo manifiesto en el plan de autonomía bajo jurisdicción marroquí para la antigua colonia española. En opinión del delegado del Polisario, la actual postura española también constituye "una omisión contraria al sentimiento de la ciudadanía, la cual ha demostrado de manera sistemática su rechazo al cambio de posicionamiento".
🟡 El Frente Polisario acusa a España de "dejación de funciones" con el Sáhara
🔴 Sánchez cede ante Marruecos y entierra la independencia del Sáhara
Según Arabi, con la firma de este acuerdo "se ha perdido, por parte de Sumar, una oportunidad histórica con respecto al Sáhara Occidental y especialmente en lo que concierne la posición prominente que España tendría que asumir en la conclusión del proceso de descolonización del territorio". El delegado del Polisario, que insiste en que España "sigue siendo potencia administradora" del territorio, esgrime que el "radical giro" de Sánchez supuso "la ruptura de un consenso unánime de la política exterior española" y advierte que ahora ya "ha dejado de ser una responsabilidad exclusiva del actual presidente en funciones".
Con todo, el representante del Polisario en España considera que tanto el PSOE como Sumar "todavía están en disposición de alinearse con el escrupuloso respeto del Derecho Internacional, la protección de los derechos humanos, el fin del espolio de los recursos naturales en el territorio del Sáhara Occidental, y en definitiva, en la defensa del derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui". "Es posible encontrar fórmulas complementarias que garanticen el respeto, la promoción y protección de las legítimas aspiraciones del pueblo saharaui", sostienen en un comunicado, reprochando que la ausencia de la cuestión del Sáhara en el acuerdo "supone una incoherencia manifiesta con respecto a las posiciones mantenidas por las dos formaciones en relación con otros conflictos internacionales".
Consideran que España ha abandonado el Sáhara
El movimiento de liberación saharaui Frente Polisario ha acusado España en numerosas ocasiones "dejación de funciones" en su papel como "potencia administradora" en el conflicto en torno al Sáhara Occidental, como afirmaron en un comunicado emitido el mayo pasado para conmemorar el 50 aniversario de la organización. El representante de la delegación saharaui en España, Abdulah Arabi, aseguró que la "capacidad de resistencia, la convicción y la aspiración de libertad" de la población sahruí "continúa igual de viva" y que seguirán defendiendo "el derecho inalienable a la autodeterminación.
El territorio saharaui, antigua colonia española, fue ocupada por Marruecos en 1975 y se produjo una lucha armada que continuó hasta 1991, cuando se acordó un alto el fuego para llegar a un acuerdo de referéndum. Este acuerdo nunca se produjo, por discrepancias con la elaboración del censo y quién tenía que votar, y la escalada del conflicto político llevó a una ruptura del alto el fuego por parte del Frente Polisario en noviembre de 2020. En el contexto del reto por la migración no regulada en la frontera entre España y el Marruecos en Ceuta y Melilla, el gobierno de Pedro Sánchez propició un acercamiento con el Reino del Marruecos para mejorar las relaciones y se ha alejado poco a poco del Sáhara Occidental, cosa que el Frente Polisario ha llegado a calificar de "traición". El delegado del Frente Polisario en España, Abdulah Arabi, afirmó en enero que Marruecos utilizaba la inmigración para presionar el Gobierno y que este "cedió a los chantajes".