El diario norteamericano Politico, uno de los referentes de política a escala mundial, ha dejado al presidente español, Pedro Sánchez, en una pésima posición en la gestión de la Covid y lo ha situado entre los dirigentes "ugly" ("horribles"). Sánchez comparte la categoría negativa con el primer ministro británico, Boris Johnson.

En el lado positivo de la balanza está en cambio la primera ministra de Finlandia, Sanna Marin, y la de Noruega, Erna Solberg, que son las que en opinión del diario lo han hecho bien.

"Valoración de la respuesta de los líderes europeos al coronavirus", titula Politico

Político reconoce que hasta ahora los electores no han penalizado a Sánchez por como ha gestionado la pandemia, pero advierte que eso no durará si las cosas no varían en España, y que puede sufrir castigo político. Afirma que a estas alturas el Gobierno todavía no tiene un operativo eficaz para controlar la pandemia. "Después de más de 6 meses desde que empezó el coronavirus, España todavía no ha conseguido poner en práctica un sistema eficaz para hacer el seguimiento y la localización de la Covid, un fallo básico que ha frustrado los esfuerzos por frenar la propagación", ha indicado. "España tiene la trágica distinción de ser el país [europeo] más afectado por la primera y la segunda ola de la pandemia", insiste.

Según el diario, Sánchez utilizó un "libro de jugadas estándar" cuando decretó el Estado de alarma en la primera ola, con una de las restricciones más duras de Europa, pero falló el sistema sanitario, y faltaron personal y dinero. El resultado fue una de las tasas de mortalidad más altas del mundo (72 por cada 100.000 habitantes)", añade.

En la segunda ola, Sánchez pasó la pelota en las autonomías y eso ha abierto una crisis política. "El resultado ha sido una respuesta desigual, a menudo inepta, a la crisis", manifiesta.

Político diferencia entre los bonos, los malos y los horribles. Entre los primeros sitúa a Italia (la gran afectada de la primera ola), los países nórdicos (Noruega, Islandia, Finlandia y Dinamarca), Grecia y Alemania. Entre los malos habría Suecia, la República Checa y Francia. Y entre los horribles, solo España, Reino Unido y Bélgica.