"Poned los letreros en catalán, que es nuestra lengua". Esta frase, escrita en letras de color rojo, podría ser un mensaje actual, en un momento en que la lengua catalana pasa por un momento de retroceso muy grave, pero no lo es. Este jueves, el Parlament ha publicado 4.500 documentos históricos digitalizados del periodo comprendido entre la Primera República y la posguerra, que se pueden consultar a la web Memòria Digital de Catalunya. Entre estos documentos hay hojas sueltas de comienzos de los años treinta que piden esta rotulación en catalán de los comercios del país. Casi cien años después, aunque la Ley de Política Lingüística establece que la señalización y los carteles de información general de carácter fijo y los documentos de oferta de servicios por los usuarios y consumidores de los establecimientos abiertos al público tienen que ser redactados, como mínimo, en catalán, son muchos los establecimientos que la incumplen y el catalán tiene un papel mucho más reducido o incluso, inexistente.

Hoja suelta digitalizada  / Parlament de Catalunya



También de principios de los años 30, la Memòria Digital de Catalunya recupera un cartel donde se anima a las mujeres a firmar a favor del Estatuto: "La votación femenina dará más fuerza moral al Estatut. ¡Mujeres, firmad las hojas de plebiscito!", se puede leer. También hay documentos más antiguos, de finales del s. XIX, como un folleto de una edición de las Bases de la Unió Catalanista, o un texto de Enric Prat de la Riba, cuando era presidente de la Mancomunitat, en 1917.

Cartel dirigido a las mujeres / Parlament de Catalunya 

Tres colecciones

De esta manera, el Parlamento ha digitalizado y puesto a disposición de los investigadores y de todas las personas interesadas en la historia de Catalunya tres colecciones. Dos de estas forman parte de la donación que en 1985 hizo al Parlamento Josep Fornas, que había sido diputado de la primera legislatura y colaborador del presidente Tarradellas en el exilio. Aparte de diputado, también fue un editor que hizo un esfuerzo por recuperar y preservar clandestinamente diversa documentación. La tercera colección la integran monografías sobre derecho y ciencias jurídicas que forman parte del fondo histórico de la biblioteca del Parlament, según informa la cámara.

Hasta tres millones de documentos abiertos

Memoria Digital de Catalunya es un repositorio cooperativo impulsado por las diferentes universidades catalanas y la Biblioteca de Catalunya. En él se pueden consultar más de 3 millones de documentos que forman parte de colecciones digitalizadas relacionadas con el país y su patrimonio.