La eurodiputada de Junts, Clara Ponsatí, se ha mostrado contundente y ha defendido la oficialidad del catalán, la Unión Europea. En su intervención en el estado de la Unión, este jueves en Estrasburgo ha criticado que se pongan trabas a la oficialidad del catalán a las instituciones europeas con argumentos económicos, como los que ha apuntado Suecia en un informe. "La razón que ha mantenido la lengua prohibida no es económica, como sabe cada eurodiputado, que hoy tendrá un coche para ir al restaurante a cenar," ha dicho Ponsatí. Según la exconsellera, el catalán se ha vetado hasta ahora para "negar" la voz y los derechos de los catalanes. "Los catalanes tenemos derecho a ser representados en catalán, y el deber de este parlamento es garantizar este derecho", ha dicho Ponsatí, utilizando brevemente el catalán en su intervención en Estrasburgo.
Ponsatí ha lamentado que las "razones políticas del PSOE" han llevado a plantearse la opción de la oficialidad de la lengua en la UE. Sin embargo, la eurodiputada ha lamentado que "inmediatamente" hayan salido voces críticas que consideran que podría ser "demasiado caro". Precisamente, sobre esta cuestión ha lanzado una reflexión al resto de diputados de la cámara europea, "aparentemente, los contribuyentes de Barcelona tienen que pagar or la traducción de mi discurso al francés o al sueco, pero los contribuyentes de París u Oslo no lo tienen que hacer por el catalán. Los que pagan impuestos tienen derechos diferentes segundos de donde sean"?.
El próximo martes, 19 de septiembre, el Consejo de Asuntos Generales de la Unión Europea debatirá la propuesta del Gobierno de hacer oficiales el catalán, el gallego y el vasco, para lo que hace falta unanimidad. En paralelo, la Eurocámara tiene abierta una petición para permitir el uso de estas lenguas en el plenario—una opción que sería automática si la iniciativa del 19 de septiembre sale adelante, pero que se podría hacer igualmente con mayoría simple de la Mesa.
Las dudas de Suecia con el catalán
El gobierno sueco tiene hoy por hoy "dudas" sobre la incorporación del catalán, el vasco y el gallego como lenguas oficiales de la UE. Esto es el que indica un documento de la Oficina de Coordinación de Asuntos de la UE en que se apunta el posicionamiento del país sobre los puntos que se tratarán en la reunión la próxima semana. En el texto, con fecha de lunes, el gobierno sueco apunta que hay que hacer una "evaluación de las consecuencias" de la medida. Concretamente, Estocolmo tiene dudas sobre "el impacto de la propuesta en la efectividad del trabajo de la UE", así como "los efectos presupuestarios y prácticos".