Mira por dónde, el día que acaba el tira y afloja sobre la reunión de la mesa de diálogo entre los gobiernos catalán y español, La Vanguardia no lo dice en portada, como hacen El Punt AvuiAra. Ayer aquel diario abría con "las trabas de Torra" al encuentro y hoy te quedas sin saber el fin del episodio. En realidad no, porque lo explican en páginas interiores, pero algunos malpensados sospecharán que el president no les cae bien o que pesa más cuando pueden hacerle quedar mal. Seguramente no es por eso. El diario de los patricios de la ciudad cuida de su público y le ha parecido mejor destacar una noticia que afecta a su bolsillo, como es la armonización de dos impuestos que afectan, sobre todo, a los patricios de la ciudad.

La Vanguardia y El País tienen el criterio de destacar la matanza horrible cometida ayer por un xenófobo ultraderechista en dos cafés turcos de Hanau, una ciudad alemana. La mayoría de las once víctimas son de nacionalidad turca. El asesino, que se suicidó, dejó un manifiesto de 24 páginas del que se deduce que odia a los extranjeros y a quienes no son blancos y pide el exterminio de varios países de mayoría musulmana del norte de África, Oriente Medio y Asia Central.

Los neonazis y otros grupos ultras cometieron 8.605 crímenes en Alemania en el primer semestre de 2019, según el ministerio del Interior. Son 900 delitos más que en el mismo periodo de 2018. Unas 180 personas han sido heridas en esos incidentes. Sólo 23 de los 2.625 sospechosos de cometerlos han sido arrestados.

Es un problema que puede contagiarse a otros países como Alemania, donde el aumento de la violencia ultra corre paralelo al aumento de los votos en favor de Alianza por Alemania, el partido de extrema derecha. Quizás sea hora de pensar al respecto. Alemania no es el único país de la Unión Europea donde la ultraderecha crece.