Europa se encuentra en una encrucijada crítica, obligada a redefinir su papel en el escenario global y a fortalecer su capacidad de independencia, tanto en la economía como en la defensa territorial y de sus valores tradicionales, frente a unos Estados Unidos cada vez más distanciados y con discursos y acciones hostiles contra el que ha sido su aliado durante décadas. La llegada de Trump a la Casa Blanca está removiendo los cimientos del orden mundial establecido, explotando esta dependencia que Europa ha tenido hasta ahora hacia el gigante americano. La transformación de la geopolítica se está produciendo a una velocidad vertiginosa, y la UE se ve obligada a considerar su posición en el orden mundial y su capacidad de actuar de manera autónoma. Los Estados Unidos están dispuestos a apostar fuerte, explotando su posición de fuerza, y Trump amenaza con socavar la alianza occidental en un momento crítico, ante la creciente influencia de China y la agresión rusa en Ucrania. La OTAN se tambalea, la amenaza de una guerra comercial ya es una realidad, Europa depende del gas natural licuado norteamericano a consecuencia de sus políticas para desligarse de la energía rusa, y la UE se enfrenta al dilema de fortalecer su propia defensa -con amenazas como la de Groenlandia en el horizonte- o seguir dependiendo de la voluntad de los Estados Unidos, que sigue queriendo dejar a Europa fuera de las negociaciones de paz entre Rusia y Ucrania. Volodímir Zelenski expuso este sábado su receta: crear un ejército propio, las "Fuerzas Armadas de Europa", y ha pedido a los líderes europeos un paso adelante para que "el futuro de Europa dependa solo de los europeos".
Macron convoca una cumbre urgente
Las portadas destilan mucha preocupación hacia el futuro de Europa, y todavía colea la retahíla de ataques del vicepresidente JD Vance desde la tribuna de la Conferencia de Seguridad de Múnich, la reunión con la candidata del partido de ultraderecha Alternativa para Alemania (AfD) y la contundente respuesta del canciller Olaf Scholz, con quien el número dos de la Casa Blanca, en cambio, no se quiso reunir. "El giro estratégico de Trump deja sola la UE", titula a La Vanguardia, que recoge que el líder francés Emmanuel Macron ha convocado a los dirigentes europeos a una cumbre urgente en París este lunes para responder al desafío de los Estados Unidos.
Una crisis estratégica sin precedentes
"La fractura con los EE.UU. empujan a Europa a una nueva época", titula El País, que también expresa su inquietud por las políticas del trumpismo, que "resquebrajan la alianza transatlántica y obligan a la UE a reaccionar", a lo que se suma que el enviado norteamericano para Ucrania afirma que "los europeos no tendrán asiento en la mesa de negociación con Rusia". En su editorial, el rotativo de Prisa afirma que la Unión Europea "se enfrenta a una crisis estratégica sin precedentes a causa del giro en la política exterior de los EE.UU., que ha pasado de ser la de un socio fiable a actuar con hostilidad hacia sus aliados del Viejo Continente. En un mundo en el cual solo se respeta la fuerza bruta, la UE se encuentra en una posición de vulnerabilidad porque se ha construido sobre la base del derecho y no del poder militar o la coerción económica", afirma El País.
Zelenski sacude la conciencia europea
También el ABC y El Mundo abren sus portadas con Zelenski como gran protagonista, después de su demanda a Europa de crear su propio ejército, que "en la Unión Europea aceptan de manera discreta, pero aluden a problemas de financiación", asegura el primero. El segundo diario madrileño, por su parte, destaca que "Zelenski despierta a Europa", y examina la situación desde diferentes ángulos. Por una parte, las tensiones que provoca que los Estados Unidos quieran dejar a Europa fuera de las negociaciones de paz de la guerra, que Ucrania no acepta; la negativa de Zelenski de firmar el acuerdo para concederle a los EE.UU. las "tierras raras" por falta de "garantías"; las exigencias norteamericanas para las que los países europeos de la OTAN inviertan más gasto en defensa, y por último, la posición de España, donde Sánchez "se presenta como paladín europeo contra los ultras, mientras Abascal busca sacar rédito de su amigo Trump". También el diario Ara abre con una pregunta relacionada con la cuestión de las negociaciones para poner fin a la guerra, de las que los EE.UU. quieren dejar fuera a Europa: ¿"Quién negociará la paz" en Ucrania?, se pregunta.
Puigdemont, "el agente decisivo delante de Sánchez"
Hay otro tema que destaca este domingo en la portada de La Razón, que abre con una crónica analizando el papel de Carles Puigdemont como "agente decisivo delante de Sánchez" y su papel cada vez más predominante en la política española. Afirma el rotativo de Planeta que "el peregrinaje creciente a Waterloo de políticos y empresarios le otorga (al presidente en el exilio) un gran poder en la política española". Y pone como ejemplo que "el futuro de Yolanda Díaz está también en sus manos por su voto en la reducción de la jornada laboral". Pero también plantea otras preguntas, para las que "el presidente del Gobierno no tiene respuesta. ¿Qué pasará con la ley Begoña? -la reforma judicial que parece diseñada ad hoc para bloquear las causas judiciales que afectan al entorno del presidente español. ¿O con el resto de decisiones fiscales que iban en el decreto ómnibus que acabó troceado por la imposición de Junts? ¿O con el reparto entre las comunidades autónomas de los menores extranjeros no acompañados que siguen hacinados en Canarias"?. Sí, en efecto, todo pasa por Waterloo.
