El enfrentamiento dialéctico que protagonizaron este viernes a los responsables políticos de Interior (el conseller Joan Ignasi Elena y el director del cuerpo, Pere Ferrer), el comisario en cap de los Mossos, Eduard Sallent, por un lado, y Carles Puigdemont y los miembros de la cúpula de Junts el otro, fue la noticia del día siguiente del retorno y escapada del presidente en el exilio, que ha vuelto a su casa de Waterloo, junto con la rabieta del juez Pablo Llarena, que pidió explicaciones diestro y derecho por el fracaso de la detención del presidente 130 de la Generalitat. En Madrid todavía rabian y cargan las tintas contra "la gran chapuza" de los Mossos, como ha bautizado El Mundo al ridículo que hizo la policía catalana, que no convenció a nadie con las explicaciones del comisari en cap Eduard Sallent y, que el atestado policial al cual tuvieron acceso los medios, incluido El Nacional.cat, todavía puso más en evidencia y ha agravado la crisis interna que vive el cuerpo policial. De más allá de las fronteras también llegaban noticias, como la vuelta de Puigdemont libre, sano y salvo al exilio belga, y de París, donde se viven las últimas horas de los Juegos Olímpicos, la delegación española vivió una jornada grande con dos medallas de oro, la esperada del fútbol, con el azulgrana Fermín como estrella, y la del atleta del Barça Jordan Díaz en el triple salto.
Sucesión de despropósitos
El Mundo da su propia interpretación de lo que dice el atestado de los Mossos, en el qué se señalan los errores que hicieron posible que el presidente eludiera el dispositivo organizado para su detención, y que resumen en la frase de su titular. "Corrimos por la acera detrás de Puigdemont y lo perdimos cuando el semáforo se puso verde". El rotativo madrileño enumera algunas de estas sucesiones de despropósitos: "Los manifestantes descubrieron sus infiltrados; les fallaron las comunicaciones con la emisora; fueron incapaces de memorizar las matrículas de un coche con matrícula holandesa y una moto que participaron en la huida; y acabaron rindiéndose al perder el rastro de los tres vehículos después de una persecución a pie". Y destacan que el atestado policial, un documento elaborado por el Àrea de Informació de Barcelona, los Mossos admiten que "solo se dieron cuenta de la presencia de Puigdemont cinco minutos antes de que empezara a dar su mitin en pleno centro de Barcelona". ¿Y qué hacen las fotografías de tres tenistas en la información de la "chapuza de los Mossos" de El Mundo? El diario explica que el coche blanco del mosso en el cual se subieron Puigdemont y Turull "lo conducía una mujer que llevaba una silla de ruedas plegada en el asiento del copiloto", y que, según el informe policial, un agente destacado en la zona sería capaz de identificar a la conductora si la volviera a ver, y este mismo policía "llegó a señalar sin género de dudas a una mujer entre una relación de fotografías de tenistas que le fue exhibida posteriormente".
El fútbol olímpico, cara y cruz
El ABC dedica toda su parte gráfica a la cara y la cruz del fútbol olímpico, con la medalla de oro de la selección masculina, que "derrotó con épica en la prórroga en Francia, la anfitriona (3-5)" y se llevó la gloria 32 años después de Barcelona' 92, y la frustración del equipo femenino, que se quedó sin bronce al caer contra Alemana en el descuento, después de que Alexia fallara un penalti. Pero el titular grande de la portada dice que "los Mossos culpan a los topos de Puigdemont en el cuerpo" de la "delirante" operación frustrada del cuerpo policial. La Razón también apuesta por los oros olímpicos de la selección de fútbol y de Jordan Díaz, y en la información sobre la polémica política, sigue focalizando la atención en el Gobierno de Sánchez. "Moncloa se desentiende de la fuga de Puigdemont y culpa a los Mossos", y también destacan en páginas interiores que "los Mossos tenían orden de detener Puigdemont, pero un único agente de la información vigiló el escenario". El País, por su parte, toca el tema Mossos pero no para incidir en el enfrentamiento con Puigdemont o los pecados cometidos en la jornada del retorno y la posterior marcha del presidente en el exilio, sino en las consecuencias, y afirma que "Illa proyecta un amplio relevo en la cúpula de los Mossos", con Josep Lluís Trapero como futuro director general de la policía catalana, lo que Illa ya había anunciado cuando era candidato.
Albert Dalmau y Javier Villamayor, en el Govern
La Vanguardia destaca en su portada que la cúpula de los Mossos elude toda responsabilidad y censura a Puigdemont, que Sallent admitió que confió en la palabra del expresidente de qué se dirigiría al Parlament, y que no se sabe el paradero del presidente (no dio credibilidad al anuncio matinal de Turull de qué volvía a Waterloo). El Ara destaca "el enfrentamiento entre la cúpula de los Mossos y Puigdemont", y El Periódico, que "Elena apunta en Puigdemont después del fiasco de los Mossos". Los diarios catalanes también empiezan a dar nombres del futuro gobierno de Salvador Illa, que este sábado tomará posesión del cargo como 133.º presidente de la Generalitat. El Periódico destaca a lo grande que "Illa prepara un Govern con independientes (no confundir con independentistas) y líderes del PSC", y da el nombre de Albert Dalmau, actual gerente del Ayuntamiento de Barcelona, como próximo conseller de Presidència -también lo publica La Vanguardia en portada-, pero el diario de Prensa Ibérica añade el de Javier Villamayor como secretario del nuevo ejecutivo.
