El pacto de gobierno entre PP y Vox en el País Valencià es la noticia que abre todas las portadas —salvo la de El Punt Avui. El País es quien lo explica con intención más crítica al señalar al responsable ("Feijóo") y nombrar al beneficiario de la manera más cruda ("la ultraderecha"), además de decir que es "el primer gran pacto" de las mismas características, como queriendo avisar de que vendrán más. Hasta ahora había un cierto miedo al reconocer el elefante en la habitación: si quiere llegar a la Moncloa, el PP necesitará los votos de Vox en el Congreso. Más que miedo, costaba admitir que la extrema derecha sería decisiva y muchos se acogían a la incertidumbre de los sondeos, que son solo un pronóstico, y confiaban en que el PP se les ingeniaría para no incorporar a Vox a los gobiernos autonómicos que están en juego. No se quería ver. El Periódico aun es prisionero de esta lógica irreal y su título insinúa que el PP ha buscado a Vox en Valencia porque no tenía más remedio, pobrecitos, pero no lo ha hecho en Cantabria porque estaba la alternativa en el Partido Regionalista. En realidad, es una forma alambicada de decirte que el PP pactará con quién le proporcione el acceso al poder sin importarle el precio.

Las portadas de este miércoles obligan a todos a abrir los ojos a la inexorable realidad de la aritmética electoral y la combinatoria parlamentaria: Feijóo quiere ser presidente del Gobierno y pagará peaje a Vox porque es la única vía posible ahora mismo. La cantidad no será simbólica: el partido ultra quiere poder de verdad y no aparente como en Castilla-León. Han aprendido. En el País Valencià, Vox ha cobrado la presidencia del parlamento autonómico y tres conselleries. Cuando llegue la hora de la verdad en Madrid, también querrá hacer caja: ministerios y buenas posiciones en la Mesa del Congreso y/o del Senado, seguramente también en los altos organismos que dependen de mayorías parlamentarias, desde el Consejo General del Poder Judicial a la Agencia de Protección de Datos o el Tribunal de Cuentas. Este es el mensaje de las portadas del miércoles, 14 de junio del 2023: votes Vox o PP, todo acabará en el mismo saco. Es el mensaje claro de El Mundo y de ABC: la coalición de gobierno PP-Vox en Valencia "aclara el camino a Feijóo" y "los pactos en toda España". Dos expresiones de la misma sustancia. No te engañan. Ya no hay que disimular más. Si suma la suma, España tendrá un gobierno parecido a los de Polonia, Hungría o Italia.

Un detalle más. Un título en El País destaca una frase del rey de España en la conmemoración del 45 aniversario (enhorabuena!) del diario económico Cinco Días, propiedad de la misma editora, Grupo Prisa. "La sociedad democrática requiere buen periodismo", dice Felipe de Borbón. Hay que suponer que si està en el título, debe ser la idea más destacada de las que pronunció. Ciertamente, la monarquía está diseñada para evitar innovaciones y originalidades pero ¿no es exigible un poco más de creatividad y un poco menos de pereza a la hora de escribir los discursos del rey? No tanto porque la mejor o peor calidad de las reales palabras tenga consecuencias —pese a excepciones sangrantes cómo la del 3 de octubre del 2017— sino sobre todo porque los ciudadanos tienen derecho a que el jefe del Estado no les haga pasar vergüenza con tópicos y baratijas.

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