Ya lo decíamos ayer que se trataba de un acuerdo histórico y hoy las portadas que nos encontramos a los quioscos dan fe. Unanimidad total en las primeras páginas de los diarios editados en Madrid y en Catalunya para recoger, hoy si, el pacto alcanzado por los 27 para hacer frente a la pandemia del coronavirus. Una unanimidad reservada para los grandes acontecimientos, aunque con matices. No podía estar de otra manera delante de la lluvia de millones que recibirá el Gobierno para la reconstrucción: hasta 140.000 millones. Hay pero quien ve el vaso medio pleno y quien lo ve medio vacío. Veámos.

El País, el diario que se vanagloria de ser más europeísta que nadie, destaca que la Unión Europea entra en una nueva era con este pacto, el salto mayor dice para un nuevo modelo presupuestario y fiscal. Así pone énfasis en el hecho que primera vez los 27 hayan acordado endeudarse, y hacerlo deforma masiva. Hay sin embargo, letra pequeña: si bien facilita ahora al gobierno de Pedro Sánchez tirar adelante los presupuestos, pone freno a las reformas prometidas por gobierno PSOE-Podemos, como derogar la reforma laboral.

Mensajes optimistas

En la misma sintonía el Ara clama "Europa apuesta por Europa" y La Vanguardia hace el título fácil del acuerdo histórico, mientras que El Periódico va un poco más allá con el suyo "140.000 millones para una economía verde y digital". Mensajes optimistas que no esconden que venden tiempos difíciles.

Hay pero quien no ha evitado caer en la tentación de aprovechar el acuerdo europeo para poner en evidencia el gobierno de Pedro Sánchez. L'ABC, que en letra pequeña habla de acuerdo sin precedentes, pone énfasis en el hecho de que la Unión enmienda la política económica de Sánchez e Iglesias. Por el contrario, La Razón abandona por un día el belicismo contra los inquilinos en la Moncloa y se apunta al optimismo general, aunque avisa al PSOE que no cuente me el PP para los presupuestos. El acuerdo en Europa no se trasladará a España.

El otro plan de reconstrucción, el del Govern de Quim Torra y Pere Aragonès pasa desapercibido en medio de la euforia europea. Sólo El Punt Avui y El Periódico se hacen eco, y uno más que otro.