Now I've had the time of my life... No sé demasiado si el primer secretario del PSC, Salvador Illa, se siente como si estuviera pasando el mejor momento de su vida, después de haber afirmado este lunes por la noche que no concurrirá al primer intento de investidura que celebre el Parlament de Catalunya porque necesita más tiempo para formar un pacto progresista. ¿Ahora bien, quién se encargará de estas negociaciones?, porque, según el ABC, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha puesto a Illa en un rincón. No sé si lo recordaréis, pero el protagonista de Dirty Dancing, Patrick Swayze (que interpreta a Johnny Castle), sale en defensa de su coprotagonista, Jennifer Grey, que interpreta a Frances 'Baby' Houseman, y dice la siguiente frase que ya es historia del cine: Nobody puts Baby in a corner (Nadie deja a Baby en un rincón).
El presidente español, afirma el citado periódico, ha decidido apartar a Illa y encargar a su ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, las negociaciones con ERC para la investidura de Salvador Illa. Mientras tanto, el presidente del Parlament, Josep Rull, empieza hoy la ronda de consultas con los grupos políticos del Parlament para designar a un candidato a la investidura. Por ahora, Illa considera que hay tres mayorías aritméticas posibles, una con PSC y Junts, que a su parecer "no es viable" porque los de Puigdemont "ya han dicho que quieren repetir elecciones"; otra con el PP y Vox, pero Illa ha recordado que se comprometió a "no hacer nada con la ultraderecha", y otra con ERC y Comuns que es "la única políticamente viable". Illa ha subrayado que esta última "necesita el liderazgo del PSC".
Ahora las negociaciones pasan por explorar un nuevo modelo de financiación para la Generalitat; una financiación singular que tiene que situar Catalunya "fuera del régimen común", tal como decía la portavoz de ERC, Raquel Sans, este lunes. El equipo negociador de ERC, formado por la secretaria general, Marta Rovira, Oriol López, Josep Maria Jové, Marta Vilalta y Juli Fernández, se reunirá con el ministro Bolaños para tratar este tema de la nueva financiación. Sánchez entiende que el PSC no es fundamental en esta negociación, ya que, opina, es el ejecutivo español quien está en condiciones de autorizarlo. El PSC quedará, pues, relegado a negociar "asuntos más simbólicos", tal como fantasía el citado diario.
Vemos también la portada de El Mundo que, si no fuera porque podemos leer la fecha, 18 de junio de 2024, pensaríamos que estamos viendo una fotografía hecha hace muchos años. Una imagen de esas que se ha hecho con un plano picado y en la que se puede ver un grupo de profesores cogiendo y elevando hacia el cielo una Constitución española como si se tratara de un paso de Semana Santa con una Virgen encima. Se trata, como explica el diario, de los primeros profesores de Constitución en la escuela, una asignatura optativa que se podrá cursar a partir del próximo curso en Murcia. Parece ser que podría causar furor entre los jóvenes murcianos, ya que uno de estos profesores relata que los alumnos le preguntan "por qué el rey no quita las leyes que no le gustan". ¿Sabéis a qué leyes se refieren, según dicen los docentes?, a leyes como la de amnistía.
Finalmente, no es sorpresa, El País intenta cargarse al presidente en el exilio, Carles Puigdemont, a quien acusa de "torpedear" la negociación del PSC y ERC. El rotativo critica al dirigente independentista porque, según asegura, "se resiste a salir del plano" y "está avivando su ofensiva contra ERC, criticando las negociaciones que los republicanos mantienen con el PSC para explorar una posible investidura de Illa" a cambio de un nuevo modelo de financiación. El País tiene clara su teoría: Puigdemont, "a pesar de saber que Illa nunca le cederá el paso", se dedica a "hacer descarrilar los contactos entre socialistas y republicanos" para conseguir una repetición electoral. Echemos también un vistazo al resto de portadas de este martes:
