La frase 'to be or not to be' (ser o no ser) es una de las más famosas de la literatura universal, proveniente del soliloquio de Hamlet en la obra homónima de William Shakespeare. En el contexto europeo actual, esta frase icónica adquiere nuevos significados y se ha transformado en "estar o no estar" con Europa. Esta es la cuestión que se dirime actualmente en la política exterior de los países de la UE, en medio de las amenazas que atenazan al Viejo Continente y la necesidad de rearmarse para poder afrontarlas y dejar de depender de los Estados Unidos, que hasta ahora han sido el garante de la seguridad europea. Pero el nuevo orden mundial y los movimientos de la geopolítica que ha provocado la llegada de Donald Trump a la Casa Banca, con el consecuente debate que provoca en muchos de sus países integrantes la necesidad de aumentar el gasto en defensa  -especialmente en España, que está a la cola de la inversión europea en este apartado- son debilidades que están haciendo traquetear los fundamentos de la UE. Porque la falta de unidad interna, especialmente debido a las posturas divergentes de países como Hungría e Italia, complican la toma de decisiones conjuntas en la Unión Europea. La primera ministra Giorgia Meloni a menudo prioriza la relación con los Estados Unidos, y se ha desmarcado claramente de enviar tropas italianas a Ucrania, que es lo que la coalición internacional para la paz ha dejado claro que quiere hacer para presionar Putin a sentarse a negociar un acuerdo de paz. Por eso es significativo que este sábado más de 50.000 personas salieran a la calle en Roma y se manifestaran en la plaza del Popolo para defender los valores fundacionales de la Unión Europea y para reivindicar la unidad en un momento crítico.

Apuesta por Europa

La misma fotografía ilustra las portadas de El País y de La Vanguardia. Se ve una niña aplaudiendo y, encima de su cabeza, una enorme bandera europea, con el fondo azul y las estrellas amarillas. "Roma sale a la calle por la UE" titula la imagen el diario de Prisa, que explica que "más de 50.000 personas, entre ellas artistas, intelectuales y alcaldes de todo signo, se manifestaron ayer en Roma para reivindicar los valores fundacionales de la Unión Europea en tiempos convulsos. Desde el escenario, el concejal de la capital, Roberto Gualtieri, celebró: "Cada uno con sus ideas, pero todos con la bandera de Europa".

El País apuesta claramente "por Europa", que es como titula su editorial, en lo que afirma: "Europa sufre la ofensiva mayor de su historia desde la derrota del nazismo" y que "grandes potencias y fuerzas políticas se proponen acabar con el proyecto europeo y, con él, con el mayor espacio de paz, libertad y prosperidad". Sigue diciendo el rotativo en su editorial que "la UE es una feliz rareza. Imperfecta y perfeccionable. Pero irrenunciable", se felicita de que la "sociedad civil italiana lo haya entendido con rapidez" y acaba con un deseo. "Buscamos aquí, también, una plaza donde olvidarnos de las diferencias para defender juntos el prodigio europeo". Y acompaña la información con un artículo de Javier Cercas, titulado "nuestra patria es Europa", donde el escritor asegura que él nunca asiste a manifestaciones, porque tiene fobia a las multitudes, pero que sin duda, él hubiera asistido a la manifestación romana, y añade que el único problema de esta manifestación es que "solo fue italiana, y tendría que haber sido europea", una "manifestación descomunal y haberse celebrado en todas las capitales de Europa". Seguramente, alguien le cogerá la idea...Y todo eso, bajo una información principal en la cual se analizan "las grietas de la defensa europea y el hecho de que el continente no tiene capacidad disuasiva real enfrente de Rusia", con unos ejércitos que sufren limitaciones de personal y defensa aérea, no disponen de mando único y acusan la fragmentación.

La Vanguardia, por su parte, también destaca acompañadora la fotografía de la misma niña aplaudiendo bajo la bandera europea, con el título: "El orgullo de ser europeo sale a la calle". En la información interior, el rotativo de los Godó explica que "Roma se llena de banderas europeas contra las amenazas en la UE", y que la manifestación que reunió a 50.000 personas que llenaron la plaza central de la capital italiana fue promovida por un intelectual, Michele Serra, que hace dos semanas, en el diario La Repubblica, propuso una reacción europeísta ante las amenazas de Donald Trump y sus aliados. La Vanguardia, sin embargo, abre su portada con un titular principal sobre los cambios demográficos a Catalunya, en el que afirma que "la sociedad catalana se rejuvenece gracias a la inmigración".

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