El Partido Popular ya hace semanas que ha abierto la puerta a una moción de censura con Junts per Catalunya y Vox con el fin de hacer destronar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y convocar elecciones anticipadas. Aunque los juntaires han definido de "fantasía" votar con la extrema derecha españolista, los populares catalanes han avalado la propuesta de Núñez Feijóo. Y es que Alejandro Fernández siempre ha sido reticente a pactar con Junts y Carles Puigdemont, mientras que los desde Génova se han intentado aproximar estas últimas semanas. "No nos someteremos a chantajes ni condiciones, pero si hay partidos dispuestos a reinicializar la política española, estaremos encantados de coincidir", ha apuntado el portavoz del grupo parlamentario, Juan Fernández, en una rueda de prensa este lunes en la sede del partido en Barcelona.
Fernández ha apuntado que "coincidirán en votaciones" con Junts "las veces que haga falta" si se tratan cuestiones que su partido considera que van "a favor de los ciudadanos". Ahora bien, ha avisado de que no se someterán "ni a chantajes ni a condiciones" para hacerlo. "Esta es una línea roja muy clara", ha remarcado.
El PP catalán también carga contra Illa
Con todo, el popular también ha querido cargar contra el president de la Generalitat, Salvador Illa, por no haber aprobado todavía los presupuestos, a pesar de comprometerse a hacerlo antes de acabar el año. "Pocas semanas después de su investidura dijo que tendría las cuentas aprobadas antes de acabar en el 2024. Este mismo enero ya podemos constatar la primera mentira, porque Catalunya no tiene presupuestos", se ha quejado.
Fernández ha lamentado "la incapacidad manifiesta" del PSC de "dar un golpe sobre la mesa" para aprobar las cuentas. "Siguen gobernando e imponiendo las políticas que marca ERC y de rebote, los Comuns", ha remarcado Fernández, que también ha acusado a los republicanos de "secuestrar la posibilidad" de tener los presupuestos aprobados a causa de sus "intereses partidistas".
Críticas al fiscal general del Estado
Fernández también se ha referido al hecho de que el Tribunal Supremo haya citado como investigado por un delito de revelación de secretos el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz. El portavoz ha asegurado que un gobierno "democrático y responsable" no puede tener un fiscal pendiente de declarar y ha tildado la situación de "surrealista". "Lo que tendría que hacer el ejecutivo español para corregir esta deformación es obligarlo a que termine o que dimita", ha exigido.