El nuevo gobierno de los populares en las Illes Balears destaca por su cruzada contra la presencia del catalán en varios ámbitos, como el sanitario, sin embargo, sus principales socios todavía son más radicales que ellos. El partido de extrema derecha Vox puso varias condiciones para facilitar la investidura de Marga Prohens como presidenta balear, entre las cuales hay desplazar el catalán de la escuela. En un principio, los populares se enfrentaron a Vox e hicieron caer la propuesta de Vox sobre la inmersión lingüística y la ultraderecha se vengó votando no al techo de gasto. Finalmente, este pulso ha acabado este lunes con el PP cediendo y aceptando, entre otras medidas, que se destinen 20 millones de euros a desmantelar la escuela en catalán.
Tensión PP y Vox
Así lo han anunciado este mediodía en dos ruedas de prensa por separado los dos portavoces parlamentarios del PP y de Vox en las Illes Balears, Sebastià Sagreras e Idoia Ribas. Según la ultraderecha, los populares han aceptado todas las enmiendas que ha propuesto Vox excepto una y, por eso, han dado apoyo a las cuentas del Govern de les Illes Balears de Prohens. El acuerdo también incluye iniciativas como que se eliminen todas las subvenciones a patronales y sindicatos, hecho al cual hasta ahora los populares se habían opuesto. El pacto también incluye la supresión del impuesto de patrimonio a los patrimonios inferiores a 3 millones de euros.
Un elemento a tener en cuenta es que el Parlament Balear vivió una situación prácticamente inédita en toda su historia. La extrema derecha se abstuvo el pasado jueves en la votación del presupuesto de tres conselleries y varias entidades públicas del Govern que están en manos del Partido Popular. Eso provocó el rechazo a las cuentas porque se produjo un empate entre los populares y la suma de votos de la izquierda y que supuso un peligro para la aprobación de las cuentas de Balears de este año.
El PP acepta enmiendas de Vox
En este contexto, Vox acusó a los populares de diseñar unas cuentas sin contar con su participación y les exigió que los trataran como un "socio real". Durante su intervención, Sagreras ha aseverado que su formación ha aceptado las enmiendas de los ultraderechistas por "responsabilidad" al considerar "más importante el todo que una parte". El portavoz popular ha manifestado, sobre el gravamen del patrimonio, que se trata de un impuesto "injusto que solamente existe en España y que no representa ni un 1% de los ingresos del Govern". Asimismo, ha anunciado que se introducirán nuevas deducciones de hasta 600 euros para los propietarios que pongan sus viviendas vacías en el mercado de alquiler, así como para el cuidado de personas mayores y para el autoempleo y segunda oportunidad.