Giro en el desarrollo de la comisión de investigación sobre la operación Catalunya del Congreso de los Diputados. El ex jefe de Asuntos Internos de la policía española, Marcelino Martín Blas, llevaba más de cuatro horas y media compareciendo cuando el PP ha tomado la palabra. El diputado Rafael Hernando ha cogido el móvil y ha reproducido un audio, que se ha escuchado a través de su micrófono. Era una conversación entre Marcelino Martín Blas y José Manuel Villarejo: «La identidad que yo me he buscado me llamo Félix», afirmaba el primero. Es el alias que, según ha trascendido, tenía cuando participaba en investigaciones policiales. Es decir, en un intento de desmontar el testimonio de Martín Blas (que ha confirmado la existencia de la operación Catalunya, ha involucrado en ella a la antigua cúpula de Jorge Fernández Díaz en el Ministerio del Interior y ha desmontado el falso informe de la UDEF contra Mas y Pujol), el PP ha usado como prueba un audio de Villarejo, dando veracidad a las grabaciones que implican a los populares en la guerra sucia contra el independentismo.

 

Ha mentido”, ha lanzado Hernando a Martín Blas. Y le ha recordado que faltar a la verdad en una comisión de investigación está castigado con la pena de prisión de seis meses a un año o una multa de doce a veinticuatro meses. Pero Martín Blas no lo ha dado por bueno y se ha intentado justificar: “¿No ve la artimaña? Digo yo en tono de broma lo de Félix y utilizan ello para decir que yo soy Félix”. Y es que en todas sus intervenciones, el ex jefe de Asuntos Internos de la policía española ha insistido que él era ajeno a la operación Catalunya y que fueron otros cargos policiales los que intentaron incriminarlo. “Yo no tenía nada que ver con esto, defendí la verdad y me siguen echando a mí la culpa”, ha afirmado en otro momento. Pero Rafa Hernando le ha contradicho: “Están hablando de identidades operativas”. Y Martín Blas ha querido zanjar el debate: “No he utilizado nunca esa identidad y se lo juro por lo más sagrado”.

La identidad de Marcelino Martín Blas como Félix también la ha puesto encima de la mesa (tanto hoy como en su anterior comparecencia el pasado martes) la diputada de ERC Pilar Vallugera. “No he utilizado nunca esa identidad, para nada es cierto, nunca he dicho que me llamara Félix”, ha negado al hilo del interrogatorio de la republicana. “¿La identidad como Félix Rodríguez no la ha utilizado nunca?”, la preguntó la semana pasada. “No, ni esa ni ninguna, yo siempre he sido Marcelino”, contestó.

 

Joan Pau Miquel le dio información sobre Jordi Pujol que “no servía para nada”

Todo ello está relacionado con la extorsión a la Banca Privada de Andorra. Marcelino Martín Blas se vio dos veces en el Hotel Villamanga con Joan Pau Miquel (el exconsejero delegado de la BPA). La semana pasada, contó como surgió su primer encuentro: “Vi a Eugenio Pino y me dijo «Acércate al Villamagna, que hay un tío que nos quiere dar una información, que está allí esperando, véte por favor». Cruzo la Castellana y me voy. Llego al Villamagna, he sido 45 años policía, sé si uno está esperando o está tocando el arpa. ¿Me estás esperando? Sí. ¿Qué tienes para mí? Nada. Encantado. Y me fui”.

Y hoy ha contado la segunda parte. El abogado José María Fuster-Fabra le pidió si Eugenio Pino (entonces DAO de la policía española) podía verse con Higini Cierco (titular de la BPA). El resultado fue que asistieron a la boda de un sobrino de Fuster-Fabra y Pino y Cierco, que estaban juntos en una mesa, hablaron. “Al final de comida, se me acercó Cierco y me dijo que llamara al del otro día porque tenía algo para mí. Le di mi teléfono a Cierco, y Joan Pau Miquel me llamó”. Se volvieron a citar en el Villamanga y allí le dio una información “relativa a Jordi Pujol” en un papel que “no tenía membrete, no tenía sello, no tenía firma y no tenía fecha” y que hablaba de una “cuenta corriente en pesetas”. Sin embargo, a su juicio “no servía de nada, ni era suficiente para iniciar una investigación”, así que la rompió y “desapareció”.