El retorno y la posterior esfumada de Carles Puigdemont, burlándo la operación Gàbia, el dispositivo de los Mossos d'Esquadra, así como los controles de la Policía Nacional y la Guardia Civil, cuesta de digerir. El Partido Popular sigue alimentando la teoría de que la marcha indemne del presidente en el exilio solo fue posible con la colaboración, por acción u omisión, del gobierno de Pedro Sánchez. Si después de los hechos el PP ya pidió la comparecencia urgente del presidente del Ejecutivo y exigió la destitución "inmediata" de los ministros del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y de Defensa, Margarita Robles, ahora estudia la posibilidad de citar en el Congreso la directora del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Esperanza Casteleiro, para que aclare si los servicios de Inteligencia tuvieron algún papel en el dispositivo para parar Puigdemont o si recibieron órdenes mantenerse al margen.
En declaraciones a Europa Press, la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha reconocido que, además de la comparecencia de Sánchez, que tiene que ser aprobada a final de mes por la Diputación Permanente, el PP se plantea también forzar la reunión de la Comisión de Gastos Reservados del Congreso para interrogar a la directora del CNI: "Es una de las cuestiones que nosotros estudiamos y que, por lo tanto, plantearemos en el próximo periodo de sesiones", ha indicado Gamarra. La ley encarga el control parlamentario del CNI a la Comisión de Gastos Reservados del Congreso, que se reúne a puerta cerrada y del cual solo forman parte un diputado por cada grupo parlamentario. Este primer año de legislatura todavía no se ha estrenado.
Dimisiones, "el mínimo exigible"
Gamarra ha señalado que en el caso del retorno y la posterior marcha de Puigdemont, los ceses y las dimisiones son "el mínimo exigible", y recuerda que así se han producido en otros países y también en España, como cuándo huyó Luis Roldán y dimitió el ministro del Interior, entonces Antoni Asunción. Los españoles no tenemos que sufrir el descrédito internacional que estamos sufriendo de la mano de Pedro Sánchez y ser el hazmerreír de cualquier otra democracia --ha señalado-. Hay que pedir explicaciones a quien ha hecho que los cuerpos y las fuerzas de seguridad no actuaran, como a quien ha ido desmantelando lo que son nuestros servicios de inteligencia en Catalunya para que no se pueda saber qué pasó".
Sánchez, un escapista
Gamarra cree que "lo que busca Pedro Sánchez es que pase el verano y que, con las altas temperaturas y el descanso estival, parezca que eso no ha pasado". La secretaría general del PP ha ironizado añadiendo que "en eso ya sabemos que Sánchez es un artista, incluso saca ventaja en escapismo a Puigdemont. Pedro Sánchez es el alumno aventajado a la hora de intentar escapar de la asunción de responsabilidades políticas de cara a los españoles".
Para la dirigente del PP, no se puede admitir que el Estado esté desapareciendo de una parte de España como es Catalunya, cuando esta es, además, una de las exigencias del independentismo. "Y aquello que no han conseguido los independentistas de primera mano, lo están consiguiendo de manera mucho más rápida a través de Pedro Sánchez", se lamenta Gamarra.
La dirigente popular también ha criticado que el presidente del Gobierno se haya marchado de vacaciones y lo ha acusado de estar "en la toalla bajo el sol" mientras España atraviesa una crisis migratoria que afecta a varias comunidades, hay una "alerta" de salud pública y las infraestructuras "están abandonadas". "Los españoles no le importan", concluye. En la entrevista con Europa Press, Gamarra también recuerda que el líder del PSOE "compró su investidura" pero no la gobernabilidad, y un año después "casi no hay avances desde el punto de vista legislativo". Según su opinión, el presidente del Gobierno no tiene "capacidad de gobernar". "Podrá sobrevivir, pero evidentemente no puede gobernar", opina, cosa que califica de "la degradación de la política y del socialismo".