El PP estudiará la forma de tumbar el uso del catalán, el aranés, el vasco y el gallego en el Congreso de los Diputados, o al menos frenar o ralentizar su normalización en la cámara baja. Así lo afirman fuentes populares, tras haberse opuesto este miércoles al acuerdo de la Mesa de la cámara baja para empezar a utilizar estas lenguas a partir del pleno de la semana que viene. Así, el grupo parlamentario estudiará, incluso, si hay que recurrir a la justicia española, porque consideran que "se están vulnerando los derechos de los diputados". Apuntan, además, que contratar a traductores implica "malgastar" dinero de "todos los españoles" cuando el castellano existe como "lengua común" de todos los ciudadanos del Estado.
Concretamente, fuentes populares del Congreso de los Diputados aseguran que ahora el partido empezará a examinar cuáles son "todos los instrumentos" que tienen a su alcance para frenar la normalización lingüística del Congreso de los Diputados. Al fin y al cabo, en el PP consideran que esta reforma del reglamento es de "dudosa constitucionalidad", por mucho que hasta ahora los letrados del Congreso solo hayan fruncido el ceño con las prisas para aprobarla, pero no por la reforma en sí. El argumento que dan los populares es que el tribunal de garantías solo considera el catalán, el vasco y el gallego oficiales en sus respectivos territorios, por lo que no tienen carácter de oficialidad en Madrid.
El partido de Alberto Núñez Feijóo también apunta que, más allá de todas estas cuestiones, no entienden el carácter de urgencia para aprobar esta reforma del reglamento, tras décadas de uso exclusivo del castellano. También critican que el PSOE haya cambiado tan bruscamente de opinión, después de años situándose al lado del PP en el rechazo del uso de las lenguas cooficiales en las Cortes españolas. A pesar de la insistencia de los populares de perseguir el catalán, el vasco y el gallego, las mismas fuentes también apuntan que el PP "no tiene nada en contra de las lenguas cooficiales" y que consideran que fomentan "la riqueza" del estado español.
Acuerdo de la Mesa para la normalización lingüística inminente
La Mesa del Congreso ha desestimado este miércoles el informe de los letrados y ha acordado que el catalán, el aranés, el vasco y el gallego se puedan empezar a utilizar ya de forma oral a partir de la semana que viene, en el pleno del 19 de septiembre. Así, se ha impuesto la propuesta de la presidenta de la cámara, Francina Armengol, de apresurarse en el cumplimiento de uno de sus compromisos para conseguir su presidencia.
Se trata, todo ello, de un simple acuerdo que comportará la contratación de los mismos traductores que actualmente trabajan en el Senado expresamente para los plenos de la semana que viene en el Congreso. Los traductores deberán realizar la interpretación simultánea de las lenguas que sean cooficiales en los distintos estatutos de autonomía y que los parlamentarios podrán escuchar a través del pinganillo. Los diputados también podrán hacer uso de lenguas como el asturiano, que no son oficiales, pero que sí se consideran parte del patrimonio del Estado. En estos casos, sin embargo, el diputado deberá realizar una "autotraducción al castellano", tal como informan fuentes de la presidencia de la cámara baja.