"La Xunta de Galicia está trabajando mientras la oposición está en campaña" o "el PP de Galicia solo ofrece incapacidad y la nada". Un mismo desastre medioambiental y dos visiones contrapuestas y antagónicas que abren la enésima brecha entre el PP y el Gobierno. El motivo de brega es ahora el vertido de pellets que está afectando a la costa de Galicia y que ha provocado la aparición de grandes cantidades de pequeñas bolas de plástico blancas en varias playas gallegas. Después de que la preocupación haya ido en aumento los últimos días, este lunes la Fiscalía de Medio Ambiente ha anunciado que lo investigará y dirigentes del PP y del PSOE se han enzarzado en una discusión pública acusándose mutuamente de culpables de la mala gestión.

Todo ha empezado a primera hora de la mañana, cuando el presidente de Galicia, el popular Alfonso Rueda, ha criticado en un desayuno informativo organizado por Europa Press que, mientras la Xunta está trabajando en este asunto, "la oposición está en campaña" y el Gobierno "acaba de aparecer". Además, Rueda ha desmentido que la Moncloa lo advirtiera de todo ello el 20 de diciembre: "No es cierto", ha lanzado, y ha añadido que "la primera comunicación oficial del Gobierno, que es lo que tiene conocimiento a través de Salvamento Marítimo que ha caído un contenedor delante de las costas de Portugal, es del 3 de enero".

Ha apuntado que ayer le llamó la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, "para ponerse a disposición", en una conversación en la cual Rueda "pidió información" sobre los contenedores que cayeron al mar y su contenido y preguntó a Ribera qué se puede esperar. El presidente gallego también se ha comprometido a "recoger todo lo que vaya llegando a las playas" y, aunque ha puntualizado que "es una competencia municipal", ha asegurado que la Xunta pondrá todos los medios necesarios para solucionarlo y admitirá toda la ayuda que haga falta.

Óscar Puente responde a Alfonso Rueda: "¿Nadie en su equipo se entera de lo que pasa?"

La réplica más inmediata la ha hecho, a través de X, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, que ha acusado al PP de Galicia de ser "contumaz en la mentira" cuando se trata de desastres medioambientales, en alusión al desastre del Prestige (en aquel momento, con José María Aznar en la Moncloa, Mariano Rajoy de vicepresidente y portavoz del Gobierno, Francisco Álvarez-Cascos de ministro de Fomento y Manuel Fraga Iribarne de presidente de la Xunta). En un hilo, Puente ha señalado que el 13 de diciembre un particular advirtió al 112 de un vertido de pellets de plástico en la playa de Espiñeirido y ha apuntado que esta llamada fue seguida, posteriormente, por otros avisos en el mismo 112. "¿Al señor Rueda no le dan traslado de estos hechos? ¿Nadie en su equipo se entera de lo que pasa?", se ha preguntado el ministro. "Que no se escude en terceros", le ha lanzado.

Puente ha añadido que el día 20, después de las investigaciones, se comunicó a la Xunta que el 8 de diciembre un barco con bandera de Liberia y armador alemán había perdido seis contenedores, uno de los cuales con pellets de plástico, en aguas portuguesas. Posteriormente, prosigue el ministro, la Xunta declaró la situación de emergencia nivel 1 (el Gobierno solo puede actuar con la activación del nivel 2) con fecha del 5 de enero y al día siguiente movilizó Tragsa (Empresa de Transformación Agraria) para cooperar en la limpieza de las costas afectadas. "Es decir, entre el día 13 de diciembre de 2023, fecha del primer avistamiento de pellets del que se tiene constancia, y el 5 de enero de 2024, la Xunta de Galicia no hace nada", ha concluido Puente.

Génova y Ferraz se suman a la disputa

En este contexto, Génova y Ferraz han querido participar en el intercambio dialéctico. El secretario de organización del PSOE, Santos Cerdán, ha denunciado que "la nada más absoluta" de estos días en Galicia es la "máxima expresión del PP" y ha lamentado que los populares gallegos "solo ofrecen la incapacidad y la nada". "Galicia no ha elevado el nivel de alarma necesario para que el Gobierno pueda actuar: el gobierno central no puede actuar si Rueda no actúa", ha denunciado, y ha añadido que lo que quiere el PSOE es "arremangarse y trabajar" para limpiar las playas de Galicia.

Por su parte, el portavoz del PP, Borja Sémper, ha compartido "la queja y la sorpresa" que ha expresado Alfonso Rueda por la "falta de información", la "falta de sensibilidad" y la "falta de lealtad institucional" del Gobierno con el gobierno gallego. Ha sostenido que "no es serio ni responsable" que la ministra Ribera acabe de llamar al presidente gallego y que haya ministros que están asignando responsabilidades al gobierno autonómico en una materia sobre la cual el ejecutivo español "es absolutamente competente". Y no ha evitado recordar la catástrofe del Prestige: "¿O es que ante determinados problemas medioambientales el competente es el Gobierno y ante otros fenómenos el problema lo tiene una autonomía? ¿O es que la conclusión es que siempre la culpa la tiene el PP"?, se ha preguntado Sémper irónicamente. "¿A qué se está jugando?", ha remachado.

Populares y socialistas solo han coincidido en hacer llamamientos a colaborar. "Se trata de que todos colaboremos", ha reivindicado Alfonso Rueda, mientras que Santos Cerdán ha insistido en que no quieren "hacer política como parece que quiere hacer" el presidente gallego "dando las culpas a otro". Y Borja Sémper se ha sumado a ellos: "Lejos de asignar responsabilidades y culpas, lo que se tiene que hacer es trabajar y actuar". Tres frases que han sido pronunciadas después de lanzarse dardos en ambas direcciones.

En este contexto, el PSOE ha compartido un vídeo en X criticando que la Xunta se ha "desentendido" de la problemática y que Alfonso Rueda "está utilizando el manual del PP, el mismo que el del Prestige", a lo que el PP de Galicia le ha respondido lanzándole que el Gobierno "no informa ni ayuda" y, a diferencia de lo que hizo el PSOE en 2002, solo "da la culpa" al ejecutivo autonómico.

Sea como sea, la catástrofe en las costas gallegas, que ya ha llegado a las costas de Asturias (esta tarde la vicepresidenta Teresa Ribera ha llamado al presidente asturiano, Adrián Barbón), requerirá una solución eficaz y competente. Mientras tanto, el PP y el PSOE, desde la Xunta y desde La Moncloa, se sacuden las responsabilidades y señalan al adversario.