La portavoz adjunta del PP en el Congreso de los Diputados, Cayetana Álvarez de Toledo, ha calificado de "delirio agónico del sanchismo", que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, exigiera que se le pidiera perdón al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, al considerar que el informe de la Guardia Civil sobre su móvil, en el cual no encontró ningún mensaje porque habían sido borrados, lo exonera de la filtración de información sobre la pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. La diputada del PP ha sostenido este domingo que hay "un proceso de profunda degradación democrática de las instituciones" a causa de una "deriva desquiciada" encabezada por Sánchez. "Ha salido el presidente del gobierno a decir que pidamos perdón al fiscal general del Estado por borrar pruebas, es decir, por presuntamente cometer un delito de obstrucción a la justicia", ha criticado Álvarez de Toledo, que considera que estas declaraciones del presidente español son una evidencia de "hasta qué punto ha perdido el sentido de la realidad".

En declaraciones a los medios antes de participar en León en la tradicional comida de Navidad del PP en esta provincia, Álvarez de Toledo ha valorado el 'sanchismo' como "una forma de pesimismo". "El sanchismo lo que hace es abonar una vieja idea que España está condenada a repetir sus fracasos históricos, que solo podemos ser aquello que los odiadores de España quisieran que fuéramos: un duelo a garrotazos", ha señalado, y así, ha reivindicado que el PP trabajará el próximo 2025 para que "se recupere la racionalidad, el juicio, la conversación pública, y la convivencia entre españoles".

Una legislatura "agotada y agotadora"

Desde las filas populares también se ha pronunciado sobre el caso del fiscal general la vicesecretaria de organización del partido, Carmen Fúnez, que ha reprochado al ejecutivo que "no haya hecho otra cosa que justificar el delito por el cual se imputa" a García Ortiz, en vez de negar su existencia. En esta línea, también se ha mostrado preocupada por el hecho de que se admita que los mensajes se han borrado por el daño que eso provoca en la imagen de la democracia española. "Hay un paradigma absolutamente inmoral dentro del sanchismo, y es que aquel responsable del PSOE que ha intentado hacer el correcto es lo que le han sacado las responsabilidades" —en referencia a Juan Lobato— mientras que, en cambio, "aquellos que se enviaban mensajes con los imputados por corrupción" continúan a los cargos, en alusión a la portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Reyes Maroto.

Por todo ello, Fúnez ha señalado que la actual legislatura española está "agotada" y resulta "agotadora" para la mayoría de españoles a causa de las causas judiciales que rodean los miembros del ejecutivo. "Al final, la agenda política del gobierno es una agenda judicial y se ha convertido en un verdadero serial judicial", ha lamentado, y ha añadido que el hecho de que el presidente y el Gobierno estén más pendientes de la agenda judicial, supone "una pérdida de tiempo, de dinero y de oportunidades" para el país, porque el ejecutivo no se centra en "traer más inversiones y gestionar mejor los recursos públicos".